Dayrí Blanco | @DayriBlanco07
Jessy Divo de Romero, rectora de la Universidad de Carabobo (UC), estaba en plena reunión de la Asociación Venezolana de Rectores Universitarios (Averu) cuando recibió una llamada urgente. La atendió. Y no dudó en responder rápidamente “sí”. Al otro lado del teléfono le pedían con desesperación autorización para abrir los portones del rectorado y que manifestantes perseguidos por la Policía Nacional Bolivariana (PNB), la tarde del jueves, se resguardaran. Lo siguiente fue un ataque contra la institución que allanó por segunda vez en el año su autonomía.
Fue una acción violenta que será denunciada ante la Fiscalía del Ministerio Público. “Tenemos cartuchos de bombas y perdigones que la PNB disparó agresivamente contra las personas que se resguardaban”.
El balance de la autoridad universitaria es de tres personas heridas, dos de ellas por perdigones y otra tras una fuerte caída en medio de la confusión. Muchos de los trabajadores del lugar resultaron severamente afectados por los gases químicos.
Iván Uzcátegui, presidente de la Federación de Centros Universitarios (FCU), también rechazó la represión que catalogó como desmedida. “ La marcha ya había llegado de forma pacífica al Consejo nacional electoral y así se mantenía cuando inició el ataque. Lo único que estábamos haciendo era manifestar en contra de las rectoras porque no estamos de acuerdo con el fraudulento proceso constituyente”.
Anunció que los movimientos estudiantiles se organizarán junto a profesores, empleados y obreros de la UC para impedir que otra violación a la autonomía y allanamientos al recinto de la institución se ejecuten.
