El Manchester United consiguió la victoria (2-0) frente al Leicester City en la última jornada de la Premier, confirmando, con este resultado, su presencia en la próxima edición de la Champions League.
El Leicester llegaba con la necesidad de ganar para entrar a la zona Champions, mientras que al United le valía el empate. Los Foxes, que hoy jugaron como locales, han tenido un rendimiento irregular desde la reanudación de la Premier tras el parón, con un balance de dos victorias, tres empates y tres derrotas.
Los de Brendan Rodgers salieron al King Power Stadium con una línea de tres centrales y con el plan que han acostumbrado durante toda la campaña: ceder el balón al rival y, al recuperarlo, salir a la contra con pases en profundidad para aprovechar la velocidad de su delantero Jamie Vardy.
Por su parte, el United, que llegó al encuentro con cinco victorias y tres empates desde la vuelta de la Premier, salió con su once de gala. Bruno Fernandes, Rashford, Greenwood y Martial formaban el ataque de los diablos rojos, escoltados por Pogba y Matic en la medular.
En los primeros minutos del primer tiempo, la posesión fue para los visitantes. Sin embargo, les costaba encontrar profundidad para romper la cerrada defensa de los locales. En el 11′ llegaría la primera opción clarísima para los ‘Reds Devils’. Rashford metió un balón colgado al área que fue cabeceado por el joven Greenwood, pero su remate se fue por arriba del travesaño.
En el minuto 14 llegó la primera ocasión para los ‘Foxes’. Un error en salida de Matic culminó en un remate de Ndidi desde la frontal del área, pero su disparo se fue alto ante la atenta mirada de De Gea.
El United intentó seguir dominando el balón, pero los errores en salida se repetían una y otra vez. Además, les costaba encontrar a Bruno Fernandes, quien, desde su llegada el pasado mes de enero, se ha convertido en una pieza fundamental en el ataque de los de Manchester.
Justo antes de que terminara el primer tiempo, Rashford tuvo la más clara para los suyos. Tras un rechace de la defensa local, se sacó un potente disparo repelido por Schmeichel.
Tras el entretiempo, el Leicester salió con otra cara, quizás enterados de que su otro rival por entrar a la Champions, el Chelsea, iba ganando 2-0 su partido y sabían que sólo les valían los tres puntos.
Los ‘Foxes’ se hicieron con el balón y exigieron una y otra vez a la zaga de los diablos rojos, sostenida por Lindelof y Maguire. En el 60′, llegó la ocasión más clara para los locales que, de haberla aprovechado, seguramente habrían modificado el transcurrir del encuentro.
Un centro desde una falta lateral fue rematado por Vardy de cabeza, pero el esférico, que tomó un extraño efecto, chocó con la cruceta de la portería defendida por De Gea. Se salvaba el United y los jugadores del Leicester se lamentaban por la oportunidad perdida.
En el minuto 71 llegó la acción que desniveló la balanza para los visitantes. Martial aprovechó un pase en profundidad para meterse en el área y, cuando estaba a punto de encarar a Schmeichel, fue derribado por Evans y Morgan. El juez del encuentro, con la verificación del VAR de por medio, señaló pena máxima para el United.
Bruno Fernandes fue el encargado de ejecutar desde los 11 metros y no falló. 1-0 y el Manchester veía cada vez más cerca su objetivo de entrar a la Champions.
Tras el gol, el Leicester siguió intentando empatar el encuentro y agotar sus opciones de entrar en la Liga de Campeones. Sin embargo, el empuje y la garra de Vardy, quien terminó como máximo goleador de la Premier con 23 tantos, no fueron suficientes para derribar el muro de la defensa roja.
En el tiempo de descuento, con un Leicester lanzado al ataque, el United consiguió marcar el tanto que definió el encuentro. Schmeichel perdió el balón al intentar regatear a Lingard y el inglés no perdonó con el arco vacío.
De esta manera, los de Solskjaer dirán presente en la próxima edición de la Liga de Campeones tras una temporada irregular que lograron salvar en las últimas jornadas. El Leicester, por su parte, tendrá que conformarse con entrar a la Europa League tras una gran campaña de la mano de Brendan Rodgers.
