Ocho días sin servicio eléctrico cumplieron vecinos y comerciantes de la avenida Carlos Sanda, de la parroquia San José en Valencia.
Mario Ramírez, uno de los afectados, manifestó que el pasado jueves 18 se escuchó una explosión y se inmediato se fue la luz. Los vecinos llamaron a Corpoelec y poco rato llegó una comisión de la empresa eléctrica y confirmó que un transformador se había dañado.
Todos pensaron que era cuestión de horas la sustitución del transformador, pero ocho días después, todavía están esperando.
Ramírez, quien es propietario de un negocio en la zona, dijo que está desesperado por la situación, pues es un problema que se suma al cierre obligado de los establecimientos por la pandemia.
Los vecinos de la zona tienen el mismo tiempo sin agua, porque este servicio depende de que haya electricidad.
Hizo un llamado a los directivos de Corpoelec para que repongan el transformador, porque es la única manera que permitirá retomar la actividad comercial.