La alta representante para la Política Exterior de la Unión Europea (UE), Federica Mogherini, condenó hoy el atentado terrorista de anoche en Bengasi, la segunda ciudad más importante de Libia, en el que murieron 34 personas y otras 80 resultaron heridas.
Tales ataques no solo han causado muchas pérdidas, sino que han aumentado la amenaza, en un entorno ya frágil, sobre el trabajo en marcha para restaurar la seguridad, estabilidad y Estado de derecho en Libia, dijo en un comunicado de su portavoz.
Mogherini condenó además que el ataque se dirigiese deliberadamente a la población civil y el personal sanitario, y trasladó su pésame a la familia de las víctimas y los heridos.
La representante comunitaria recordó que el 22 de enero los ministros de Asuntos Exteriores de los Veintiocho reiteraron su compromiso con el trabajo que lidera el representante especial de Naciones Unidas para Libia, Ghassan Salamé, con el fin de conseguir una solución duradera a la crisis que vive el país.
«La UE espera que todos los actores legítimos en Libia trabajen juntos hacia este fin, mostrando voluntad de compromiso y poniendo por delante los intereses del pueblo libio», incidió.
Anoche, dos coches bombas estallaron frente a una mezquita del distrito de Al Salmani en Bengasi, el primero de ellos cuando un grupo de fieles salía de una de la mezquita del barrio de Almaniya, en el centro de la urbe, y el segundo 30 minutos después, cuando ya habían llegado los servicios de socorro.
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