Por primera vez en la historia del estado Vargas, el pueblo de La Guaira soportó el pasado lunes más de ocho horas de un feroz ataque con bombas lacrimógenas por parte de los efectivos de la Guardia Nacional Bolivariana destinados para sofocar la protesta de los vecinos que reclamaban las bolsas de comida que no llegan.
La manifestación comenzó a las 5:00 de la tarde en el sector Punta de Mulatos, cuyos vecinos trancaron en ambos sentidos la avenida Carlos Soublette, obstaculizando completamente la comunicación de este a oeste, en una región que cuenta con una sola arteria vial.
Al caer la tarde se incorporaron los vecinos de Guanape, sector La Veguita, en Macuto y finalmente los del casco colonial de La Guaira. Los efectivos militares estrenaron tanquetas nuevas y para los vecinos también fue una novedad la inhalación de gases lacrimógenos.
En el sector Punta de Mulatos murió Sócrates Salgado (49), un paciente cardíaco que no soportó el impacto de los gases tóxicos.
Al Hospital del Seguro Social, Dr. José María Vargas, fueron ingresados varios heridos, en su mayoría niños menores de 8 años, asfixiados. Otras personas recibieron perdigonazos.
Al caer la noche, jóvenes encapuchados con franelas confrontaron con piedras y botellas a los uniformados que los repelían con lacrimógenas y perdigonazos. Los funcionarios apostados en la esquina de Pachano disparaban sus escopetas hacia la Iglesia San Juan de Dios, por donde se atrincheraban los manifestantes. Los enfrentamientos se prolongaron hasta las 2:30 de la madrugada de este martes.
