Un grupo de venezolanos que se encuentra en situación de calle, incluyendo madres con hijos en brazos, permanecen desde el martes a las puertas del Ministerio del Poder Popular para Hábitat y Vivienda (Minhvi), en Chacao; y aseguraron que se quedarán en el lugar hasta que el Gobierno les dé una solución definitiva a sus problemas habitacionales.
Aunque muchos de ellos confesaron ser adeptos al oficialismo, expusieron los diferentes problemas de vivienda que enfrentan, así como el maltrato del que han sido víctimas por parte del director de adjudicaciones del Minhvi, Julio César Piñango.
Entre los casos, resaltan los miembros de 16 familias que residían en apartamentos del sector Manguito VI, en los Valles del Tuy, asignados por el programa Gran Misión Vivienda Venezuela, quienes denunciaron que posteriormente fueron desalojados y sus pertenencias fueron robadas por presuntos delincuentes. Piden ser reubicadas hasta que se les resuelva el problema definitivamente.
«Hoy vinimos decididos a quedarnos. Soy chavista y madurista. Nosotros dormimos cinco días en Miraflores y de allí nos recogieron y nos trajeron para acá, pero no nos solucionan. Nos quedaremos. Cada vez que nos ven acá en la calle con nuestros niños los del Minhvi nos amenazan con la Lopna», indicó María López, quien además, aseveró que tiene un año viviendo en la calle.
las casas se están cayendo, los edificios están cediendo, no tienen servicio de agua potable y las aguas negras corren por las calles
López agregó que han hecho todas las denuncias correspondientes sobre el caso, incluso ante el Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc). «Estamos ubicados en viviendas de alto riesgo, y le hemos pedido mil veces al Minhvi que nos atienda y no lo hace».
Otra situación es la que se presenta en el sector El Morro y que afecta a 476 familias que allí habitan. Uno de los afectados, que prefirió no identificarse, explicó que las casas se están cayendo, los edificios están cediendo, no tienen servicio de agua potable y las aguas negras corren por las calles porque las cloacas están rotas.
«Me siento destruido, esto no es vida. Si no nos dan respuesta seguiremos trancando la calle. Y si no nos atienden iremos a Miraflores. Hemos presentado denuncias por escrito, pero no nos dan respuesta», sostuvo el ciudadano.
Yoselín Martinez, con su bebe en brazos, más otros tres que tiene, contó que está viviendo en un lugar donde «hasta las ratas se meten», por lo que exige una vivienda digna. Queremos pagar nuestra vivienda, no queremos nada regalado, señaló, al tiempo que refirió que su hermana, que también tiene cuatro hijos, está en la misma situación.
Joanna Villamizar, otra joven madre, contó que vivía alquilada y fue desalojada de su vivienda y no tiene dónde vivir. Tuvo que dejar su empleo para poder atender el problema de la vivienda. Está viviendo en la calle desde hace tiempo y, desde ayer, frente al Minhvi.
