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El presidente de Venezuela anunció este lunes que su nación ingresará como observadora en la Organización para la Cooperación Islámica (OCI), después de haber participado el domingo y el lunes en una cumbre de ese bloque, formado por 57 países, celebrada en Astaná, capital de Kazajistán.

«Venezuela va a ingresar a la Organización Islámica de Cooperación, de 57 países de los más poderosos del mundo, de los países emergentes del siglo XXI, va a ingresar en la calidad de observador», dijo el jefe de la revolución bolivariana, que ya ha solicitado entrar en la OCI.

Maduro hizo este anuncio en un consejo de ministros que fue transmitido de manera obligatoria en todas las cadenas de televisión, en el que reveló asimismo, después de deshacerse en elogios hacia el país que acogió la cumbre, que Caracas abrirá una embajada en Astaná.

El líder chavista se reunió durante su viaje a Kazajistán con presidentes de varios países productores de gas y petróleo con vistas a llegar a acuerdos para provocar un repunte de los precios de estas materias primas que extrae en cantidades ingentes Venezuela.

El Gobierno de Caracas pretende profundizar sus relaciones con países emergentes para contrarrestar los efectos de las sanciones financieras dictadas el mes pasado por Estados Unidos contra Venezuela, a la que numerosos países de América y Europa acusan de llevar al país hacia una dictadura.

Maduro -que participó en la cumbre de Astaná en calidad de presidente del Movimiento de Países no Alineados- se reunió durante la cita de la OCI con el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, y con el mandatario iraní, Hasan Rohani.

El jefe del Estado venezolano destacó hoy la «química» que existe entre él y Erdogan, que según Maduro «quiere visitar Venezuela muy pronto» y con cuyo Gobierno tratará de forma inminente «el tema de la cooperación aérea», «alimentaria, financiera, energética, comercial, económica, industrial, tecnológica, política y espiritual».

«Porque el presidente Erdogan quiere construir una gran mezquita aquí en Caracas. Yo le dije, bienvenido, Venezuela es el punto de encuentro espiritual de todas las religiones del mundo», remachó el presidente del país caribeño.

Maduro también tuvo tiempo de repasar su reunión con Rohani.

«Muy pronto estaremos en Teherán desarrollando la Comisión Mixta de Cooperación Estratégica y firmando los acuerdos para seguir avanzando en la alianza energética, en la construcción de viviendas y del desarrollo de industrias farmacéuticas», dijo Maduro sobre uno de esos encuentros.

Durante su viaje, el presidente venezolano hizo dos escalas -una a la ida y una a la vuelta- en Argelia, donde se reunió con las autoridades locales.

Maduro anunció una visita «muy pronto» del ministro de Energía de Argelia -uno de los primeros productores mundiales de gas y petróleo- para expandir la cooperación con Venezuela en materia de estos recursos naturales.

El mandatario -que mostró su admiración por el Islam- dijo haber quedado impresionado por el sector agrícola argelino, y abogó por intensificar las relaciones entre Caracas y Argel en este capítulo para atraer inversión internacional al campo venezolano

 




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