Venezuela enfrenta el mayor éxodo de ciudadanos en América Latina de las últimas décadas. Los venezolanos que solían comprar en países extranjeros más de dos artículos iguales, ahora emergen como la nueva clase baja del continente.
Cerca de cinco mil ciudadanos venezolanos emigran cada día y en Trinidad y Tobago algunas mujeres con títulos universitarios trabajan como prostitutas o son forzadas por las personas que prometieron ayudarlas, publica el The Washington Post.
Un ejemplo, reseña el diario, se registra en la localidad de Maracas, en Trinidad, donde una mujer trabaja como empleada doméstica, cuando antes visitaba el lugar para vacacionar.
Se llama Luz y es madre soltera venezolana, de 21 años. Confiada en un hombre que se había pasar como cristiano, se atrevió ir hacia allá en barco. Pero a cambio recibió golpes y abusada por varios hombres.
Venezuela, por 30 años, tuvo una bonanza económica significativa debido a los ingresos petroleros y al trabajo de inmigrantes italianos y españoles.
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