Tras la sentencia de la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) que instó al Consejo Nacional Electoral (CNE) a reprogramar el proceso de validación que inició el 4 de marzo; Vicente Bello aseguró que el Poder Electoral podría usar la sentencia como una nueva excusa para retrasar aún más las elecciones regionales previstas en la Constitución para diciembre de 2016.
La Junta Nacional Electoral del CNE trabaja en función de un nuevo cronograma que podría fijar la celebración de las regionales para el 26 de noviembre o 3 de diciembre, cuyas fechas estarían sujetas a modificación por esta sentencia, posponiendo aún más la elección de gobernadores y diputados a los consejos legislativos.
La Mesa de la Unidad Democrática (MUD) aún no discute la sentencia de la Sala Constitucional que da respuesta a unos recursos de interpretación solicitada por Bandera Roja con lo que facilita la estructura de las organizaciones políticas pequeñas de las fracciones aliadas al Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV).
El representante electoral de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) ante el CNE explicó al diario La Verdad que, con esta interpretación la Sala Constitucional establece que en aquellos estados donde los partidos hayan alcanzado el 0,5 por ciento ya no necesita renovar allí sus nóminas, sino que le quedaría el resto de los estados hasta completar los 12.
Bello dijo que el beneficio que trae la sentencia para algunas organizaciones es que los que obtuvieron poco apoyo en las últimas elecciones, ahora les facilita el proceso, como a Nuvipa, Movimiento de Integridad Nacional (MIN Unidad), Bandera Roja, Democracia Renovadora y el MAS.
Bello asegura que a ocho meses para finalizar el año, el órgano comicial está en capacidad de organizar todas las elecciones pendientes en el país: las regionales retrasadas, las municipales que vencen en diciembre y las presidenciales que corresponden para el 2018.
