María Paz Castillo, esposa del sub-comisario de la extinta Policía Metropolitana de Caracas, Marco Hurtado, aseguró este viernes a través de un contacto telefónico en el programa «Primera Voz», que aún no puede creer los años que ha pasado Hurtado tras las rejas. «El tiempo ha transcurrido de una manera tan abrumadora que ellos están cumpliendo hoy 13 años y siete meses, eso es algo muy difícil. Hubo un momento que permanecíamos en silencio para tratar de asimilar la situación».
Paz Castillo calificó como «triste» que la libertad de los presos políticos sea negociada en una mesa de diálogo entre Gobierno y oposición.
Las modificaciones en el Código Penal venezolano permitieron que la condena de Hurtado fuese reducida a 13 años y un mes, pero todavía se encuentra encarcelado. «El Tribunal de Maracay lo mantiene preso, eso demuestra que no hay parcialidad de los poderes en el país».
De no recibir respuestas por parte de las instituciones gubernamentales, Paz Castillo expresó que realizarán una vigilia frente a la sede del Tribunal Primero de Ejecución de Aragua.
A Marco Hurtado se le asignó una pena de 16 años y ocho meses por complicidad en las muertes de dos ciudadanos en Puente Llaguno, hechos ocurridos durante las manifestaciones del 11 de abril de 2002.
«Queremos una navidad sin presos políticos»
La familia Bolívar también mantiene viva sus esperanzas. Erasmo Bolívar, compañero de labores de Hurtado, cumple una condena de 30 años por el mismo caso en Puente Llaguno.
«Hoy es el día de la mesa de conversaciones entre oposición y Gobierno, por eso amanezco un poco emocionada porque puede que Erasmo esté con nosotros este fin de semana. Su hija lo espera impacientemente», destacó vía telefónica, María Bolívar, tía del ex-agente policial.