Cinco personas han muerto por el vertido de fuelóil que comenzó durante el fin de semana y que se combate hoy en la bahía de Balikpapan, puerto indonesio en la isla de Borneo, donde las autoridades han declarado el estado de emergencia.
Las víctimas mortales son cinco personas que practicaban la pesca recreativa cuando ocurrió el derrame que luego se incendió, según el jefe de la Agencia Nacional de Búsqueda y Rescate en Balikpapan, Oktavianto, que, como muchos indonesios, utiliza un solo nombre.
El portavoz señaló que los gases del incendio, que ha sido contenido, afectaron a cientos de personas a través de problemas respiratorios y náuseas.
Las autoridades, que coordinan con la estatal Pertamina y PT Chevron Indonesia, aún no ha determinado la causa del vertido ni el daño causado a la economía y el medioambiente.
El vertido afecta a la costa este y norte de esa ciudad, la segunda más grande de la provincia de Kalimantan Oriental, y ya cubre una superficie de unos 12 kilómetros cuadrados.
Pertamina, que tiene una refinería de petróleo en la zona, ha asegurado a los medios locales que el vertido no es crudo sino combustible para barcos y ha negado cualquier responsabilidad.
Indonesia comparte la isla de Borneo, rica en recursos naturales, con Malasia y Brunei.
