Hace seis meses dejó de imprimir sus suplementos especiales. (Foto Archivo/El Carabobeño)
Marcos Castillo || mcastillo@el-carabobeno.com
El Diario El Siglo anunció este viernes en un editorial que ocupó la primera plana que su inventario de papel alcanza para menos de un mes, por lo que tuvo que reducir su edición impresa a dos cuerpos. Uno de los periódicos más importantes de Aragua se suma así a la crisis de papel que afecta a la mayoría de los diarios venezolanos, debido a que no se les han otorgado las divisas necesarias para la importación de su principal materia prima.
“Luego de 41 años de historia comunicacional, el diario El Siglo se ve en la impostergable necesidad de reducir su despliegue informativo diario a partir de hoy, y hasta tanto se solvente la grave situación planteada con la falta del papel periódico, ya que nuestro inventario alcanza para menos de un mes”, con esta frase el rotativo abre su editorial.
Por la falta de papel, El Siglo tuvo que dejar de imprimir hace seis meses los suplementos especiales Evas y Chamos. “Nuestra edición diaria constará de dos cuerpos, que resumirán las noticias comunitarias, deportivas y de sucesos, además de nuestro tradicional servicio de avisos clasificados, en señal de que sigue intacto nuestro compromiso con el lector, aun en medio de la crisis de insumos que enfrentamos”, alerta.
El Siglo teme que la edición tenga que ser recortada aún más o, peor aún, que deba detener indefinidamente su impresión. “Hemos llegado a este punto luego de agotar todas las vías formales e informales para lograr acceder a la materia prima. Y a pesar de la solidaridad de las instituciones y el gobierno regional, no se ha podido solventar este grave problema”, admite.
El diario precisó que el procedimiento para la obtención de las divisas para la importación del papel periódico desde Canadá “no ha podido llegar a feliz término”, porque no se le ha otorgado ni la AAD (Autorización para la Adquisición de Divisas) ni la ALD (Autorización de Liquidación de Divisas), ambos procedimientos a cargo del Centro Nacional de Comercio Exterior.
Menciona además que otro aspecto de la crisis es que no han podido cancelar una deuda con el proveedor canadiense, correspondiente a los años 2013 y 2014, producto igualmente de la falla en la liquidación de las divisas. El editorial advierte también que esta situación pone en riesgo a 350 empleados directos y 3 mil indirectos.
