Machado fue despojada de su investidura como diputada. (Foto @MariaCorinaYA)
EFE
La exdiputada María Corina Machado señaló este miércoles que recibió la citación de la Fiscalía para que acuda a declarar en calidad de testigo el próximo 16 de junio, por su supuesta implicación en un plan para asesinar al presidente Nicolás Maduro, y promover un golpe de Estado.
«Llegó la nueva prueba d la persecución: citación de la Fiscalía 20 Nacional para acudir a declarar en carácter de testigo #16J», publicó Machado en su cuenta en la red social Twitter, en la que adjuntó una fotografía con la boleta de citación.
Según la boleta de la Fiscalía, Machado comparecerá por la presunta comisión de un delito «contra la independencia y la seguridad de la nación» y de asociación para delinquir, previsto en la Ley contra la Delincuencia Organizada y Financiamiento al Terrorismo.
El dirigente del gobernante Partido Socialista (PSUV) Jorge Rodríguez denunció la semana pasada «un complejo plan dirigido a acabar con la paz» que incluía un «magnicidio» y un «golpe militar» que ya fue abortado y que apoyó mostrando varios correos atribuidos a Machado.
En los correos se podían leer supuestos mensajes a diferentes actores de la oposición venezolana, entre ellos, el exembajador Diego Arria y el abogado Ricardo Koesling y donde además se mencionaba al nuevo embajador de Estados Unidos en Colombia, Kevin Whitaker.
La exparlamentaria afirmó el miércoles que Maduro ya la sentenció al llamarla «asesina» durante un acto gubernamental el martes pasado en relación con su supuesta participación en este plan.
Machado, quien denunció en la Fiscalía a Rodríguez por siete delitos, aseguró que los correos se corresponden con sus cuentas pero son falsos, y que ella no quiere ni un magnicidio ni un golpe de Estado sino que el presidente Maduro renuncie.
La exparlamentaria afirmó el miércoles que Maduro ya la sentenció al llamarla «asesina» durante un acto gubernamental el martes pasado en relación con su supuesta participación en este plan.
Machado fue despojada de su investidura como diputada después de que intentara participar en una sesión de la Organización de Estados Americanos (OEA) como parte de la representación de Panamá para denunciar la situación de vulneración de los derechos humanos que, dice, vive el país sudamericano.
