A Kleiby Aníbal Henríquez Fernández (16) lo sacaron de una fiesta de cumpleaños en el sector Vuelta de Enrique, barrio Unión, Petare, le dieron un tiro en el abdomen y no lo remataron porque uno de los que estaba en el grupo dijo “no lo vayas a matar que el chamo es sano”.
El pistolero lo estaba apuntando en la cabeza y decía que iba a darle tres tiros más.
El hecho ocurrió a la 1:00 de la madrugada del domingo 12, unos vecinos les avisaron a los familiares, siendo trasladado al hospital Domingo Luciani de El Llanito, donde falleció el martes a las 10:30 de la noche.
Henríquez Fernández era el mayor de tres hermanos, este año se graduaría de bachiller en el liceo Mariano Picón Salas, de Petare, trabajaba como buhonero o en cualquier otro oficio para costear sus estudios y ayudar a su madre, y en los últimos días estaba reuniendo el dinero para comprar la camisa de su promoción.
-Tenía deseos de superación, quería graduarse de bachiller, hacer una carrera y ser funcionario policial; dijo muy consternado su tío Víctor José Isturiz, cuando hacía los trámites en la morgue para retirar el cuerpo.
El adolescente llegó consciente al hospital, pedía que no lo dejaran morir, fue operado, ingresado en terapia intensiva, pero no sobrevivió.
Los homicidas son delincuentes de la zona y tras balearlo le robaron la cartera.
Istúriz ha perdido a cuatro familiares a manos de la delincuencia. Al padre de Kleiby lo mataron hace 16 años en el mismo barrio cuando tenía poco más de 20 años de edad.
