El alcalde del municipio venezolano Angostura, Yorgi Arciniega, reiteró este viernes que 30 personas, entre ellas 13 indígenas, fallecieron por el colapso de la mina Bulla Loca. La mina se derrumbó el lunes y las autoridades nacionales dan un balance de 16 muertos.
«Hubo 17 muertos aquí en La Paragua y (otros) 13 difuntos indígenas que se quedaron en las localidades de las comunidades indígenas», dijo Arciniega a EFE. El alcalde ya había ofrecido el miércoles la misma cantidad de decesos por este siniestro en la mina ilegal.
Arciniega dijo que el Gobierno ha «prestado apoyo a ciertos lancheros» para las labores de búsqueda y rescate. Durante este viernes «ha bajado la afluencia» de sobrevivientes y heridos que llegan a la Paragua, procedentes de la mina, a varias horas de distancia.
El funcionario aseguró que hoy «siguen las búsquedas en Bulla Loca tratando de descubrir si hay otros tapiados». No se sabe hasta cuándo se extenderá el operativo. Arciniega asegura haber prestado ayuda a familiares de los mineros apenas se produjo el accidente.
ONG y sobrevivientes coinciden con Arciniega
La ONG Kapé Kapé, que coincide en la cifra global con el alcalde, ya había informado la mañana del jueves que, al menos tres indígenas fallecieron en el derrumbe.
Por su parte, el Gobierno informó la noche del miércoles que se habían registrado 16 víctimas mortales, una cifra que las autoridades nacionales mantienen invariable.
Sobrevivientes del derrumbe aseguraron a EFE que el Gobierno miente sobre el número de fallecidos y exigieron conocer los datos reales.
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