Amnistía Internacional (AI) expresó este martes su preocupación por la "masividad" de las denuncias de abusos y casos de violaciones a los derechos humanos presuntamente cometidas por las fuerzas de seguridad chilenas durante las protestas, que han dejado hasta ahora una veintena de muertos.
Así lo indicó a Pilar Sanmartín, investigadora de Amnistía Internacional (AI) para situaciones de crisis en las Américas, que llegó a Chile este lunes para documentar las denuncias de abusos policiales y posibles crímenes de derecho internacional cometidos desde que estalló la crisis hace doce días.
"Parece por ahora que no se trata de casos aislados sino que las cifras más bien hablan de una masividad", dijo a Efe Sanmartín, quien consideró que se debe investigar a los altos mandos policiales y militares para saber si ordenaron reprimir con violencia las manifestaciones y las protestas.
La activista consideró "alarmantes" las cifras del Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH), que ha contabilizado 3.535 detenidos en todo el país y 1.132 civiles heridos, 595 por disparos (perdigones, balines de goma, disparos de bala o arma no identificada).
Sanmartín dijo que AI está preocupada por la violencia policial que se ha seguido registrando desde que el Gobierno levantó los toques de queda y los estados de emergencia que decretó en buena parte de Chile.
"Parece ser que este tipo de actuación de la fuerza pública no cesa y es lo que nos preocupa, que estas imágenes de represión, de un inadecuado actuar de la fuerza pública, son las que nos trajeron aquí y seguimos registrándolas cada día", señaló.
La investigadora subrayó que el equipo de crisis de AI ha trabajado en escenarios de "graves violaciones de los derechos humanos" en Venezuela, Nicaragua, Honduras y México, por lo que le sorprende estar realizando este tipo de pesquisas en Chile.
"No nos esperábamos un contexto así en Chile, lamentamos mucho tener que terminar el año visitando el país porque hay indicios de graves violaciones", enfatizó.
El INDH ha presentado 120 acciones legales ante la Justicia, entre las cuales hay 18 denuncias de tortura sexual, un asunto que AI considera especialmente delicado.
"Llaman la atención los casos de violaciones a hombres que fueron detenidos y que han denunciado haber sido torturados sexualmente y muchos otros actos que son aberrantes, como casos de desnudez forzada a mujeres con el ánimo de humillarlas por haber protestado", señaló Sanmartín.
"Eso es inaceptable y no solo tiene que parar, sino que necesitamos ver que la Fiscalía investiga, que procesa, y finalmente se juzga y condena", agregó.
La representante de AI consideró que el Gobierno del presidente Sebastián Piñera "no está poniendo todas las medidas a su alcance" para frenar los abusos de la Policía y le recomendó "escuchar las demandas de la gente".
El trabajo de campo del equipo de crisis de AI consiste en entrevistar a víctimas para recoger su testimonio, visitar los lugares donde han ocurrido abusos y sostener reuniones con grupos de la sociedad civil, organismos pro derechos humanos y autoridades de Gobierno.
Paralelamente analizarán la veracidad de las decenas de vídeos que circulan por las redes sociales sobre los incidentes durante la crisis y en dos o tres semanas redactarán un informe con sus conclusiones preliminares.
El alza en el precio del pasaje del metro de Santiago desató una oleada de protestas que derivó en demandas sociales más amplias para reducir la desigualdad. EFE