Dos oficiales de la Policía Nacional Bolivariana fueron asesinados este viernes al suroeste de Caracas, en un lapso menor de cuatro horas. El primero fue el supervisor agregado Carlos Moya, ultimado en horas muy tempranas, cuando viajaba en una unidad de transporte público, en la cual se originó un robo a la altura de Las Mayas, cerca del Club de Suboficiales y Círculo Militar, de El Valle.
Moya era un funcionario de larga trayectoria, migrado de la extinta Policía Metropolitana y estaba adscrito a la Estación Policial de la PNB en El Valle.
Al conocerse la muerte del oficial superior, inmediatamente se desplegaron las comisiones hacia Las Mayas, en busca de los homicidas. Pasadas las 10 de la mañana se originó un enfrentamiento en el cual resultó herido por un proyectil único el oficial agregado Luis Jesús Bravo Reyes (28). La bale le perforó la mano derecha, piernas derecha e izquierda, cercenándole la arteria femoral.
Sus compañeros lo trasladaron al hospital Miguel Pérez Carreño, donde certificaron su muerte.
Bravo Reyes estaba adscrito a la División de Inteligencia de las Fuerzas de Acciones Especiales (FAES).