Ya no será en su versión impresa. Salió de circulación por la decisión del complejo editorial Alfredo Maneiro de no venderles más papel. Pero El Impulso seguirá informando. Lo hará a través de su página web y de las redes sociales. «Así enfrentaremos esta inexplicable actuación de esa empresa gubernamental, que nos dejó sin materia prima para seguir circulando».
Carlos Carmona, presidente del diario El Impulso, habló sobre las estrategias para lidiar con este cierre que evidencia la censura que hay en el país. Al igual que El Carabobeño, se apoyarán en la web y las redes sociales. «Al menos por ahí se puede transmitir la información. Es lo único que puedo hacer».
Los problemas de El Impulso con el complejo Maneiro no son nuevos. «Desde hace unos cinco años hemos estado sorteando las dificultades en la relación con ese complejo editorial. Nos ayudábamos con préstamos o comprando a bachaqueros, algo que no pudimos sostener».
Carmona espera poder imprimir de nuevo. Piensa en un semanario. Por lo pronto, reconoce que al igual que otros medios, El Impulso cayó en esta trama de censura. Solo espera que la gente se de cuenta de lo que está sucediendo. «Hemos hecho del conocimiento internacional este grave cierre de un medio de comunicación. Estamos dando a conocer en el exterior la grave situación de la libertad en Venezuela».
El presidente del centenario diario barquisimetano es un convencido de que el gobierno ataca a los medios de comunicación que le son incómodos.
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TRABAJADORES AFECTADOS
La parte laboral es la que más me duele, reconoció Carmona. «Gente que tiene veinte, treinta y hasta cuarenta años dentro de la empresa. Muchos, ante la angustia y la duda, optaron por irse a países vecinos o por “montar tienda propia”, comentó Carmona en una entrevista exclusiva al diario El Carabobeño. “Tengo que respetar sus decisiones, porque la angustia que están padeciendo sobre si sobrevivirán mañana o no, o si podrán comer, es una realidad tangible. Es una decisión que no debe ser criticada, ya que se escapa de sus manos».
A su juicio, este cierre impactará de manera decisiva a otras personas, como distribuidores y kiosqueros que obtenían ingresos por la venta del impreso para poder subsistir.
A LA ESPERA DE UNA RESPUESTA
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Carmona confesó tener muchas preguntas que le gustaría hacerle a la Corporación Editorial Alfredo Maneiro y al Gobierno. “No sabemos ni cuándo, ni cómo la corporación Alfredo Maneiro se dignará a vendernos papel y si es que lo harán algún día. Por ahora no tenemos información de ningún tipo, porque ni siquiera atienden el teléfono”.
Luego de 114 años de trayectoria El Impulso, uno de los diarios más antiguos del país, informó el pasado sábado que dejaría de circular debido a que el complejo Editorial Alfredo Maneiro, ente gubernamental que monopoliza la venta del papel periódico en el país, no despachó la materia prima.
El Impulso se suma de esta forma a otros medios como El Carabobeño y Tal Cual, que también dejaron de circular en su versión impresa por la ausencia de papel.
