Prosperar en medio de un entorno adverso sí es posible. Así lo demostraron Mann Hummel de Venezuela y Embotelladora Venezuela, dos empresas pertenecientes al parque industrial carabobeño, galardonadas este martes durante el congreso anual de la Confederación Venezolana de Industriales (Conindustria) por su positivo desempeño en 2019, a pesar de las dificultades.
Mann Hummel de Venezuela, postulada por la Cámara de Industriales del estado Carabobo (CIEC), fue reconocida por Conindustria con el galardón de “Empresa Manufacturera de 2019”. Perteneciente a un grupo de fabricación alemán que desarrolla, produce y distribuye sistemas de filtros de aire y líquidos, esta compañía lleva más de 40 años instalada en la Zona Industrial de Valencia, donde maneja la marca Filtros Wix.
Para Luis Alberto Hernández, presidente de la CIEC, Mann Hummel de Venezuela es una empresa representativa de la industria carabobeña “que se ha mantenido durante este tiempo prestando servicios y productos de calidad a toda la población venezolana”.
Por su parte, Embotelladora Venezuela fue propuesta por la Cámara de Pequeños-Medianos Industriales y Artesanos de Carabobo (Capemiac). Con más de 70 años de trabajo en la capital carabobeña, Conindustria la premió como la “Pyme de 2019” por su producto estrella, la reconocida bebida naranja Green Spot.
“Para nosotros en la Cámara de Industriales esto representa un gran orgullo, porque se marca lo que desde hace mucho tiempo venimos trabajando, que es ese lema ‘Hecho en Carabobo’”, dijo Hernández en entrevista con El Carabobeño. “Queremos realmente que exista un cambio económico que nos permita a nosotros regresar. Hace unos 20 años éramos una industria fuerte”.
Industriales a 15 y 20% de su capacidad
En 1998, antes que Hugo Chávez asumiera por primera vez la presidencia de la República, existían en la entidad carabobeña al menos mil 687 establecimientos de la industria manufacturera, según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE). Hoy, luego de más de dos décadas bajo el mismo sistema político y económico, esa cifra no supera los 200 establecimientos.
A juicio de Hernández, Venezuela está débil económicamente porque la industria está débil, ya que en los últimos años solo se ha reportado el cierre de empresas ante la falta de incentivos y seguridad jurídica, fallas de los servicios públicos, entre otros factores. “Como siempre hemos dicho, si queremos ver cómo está un país, veamos cuál es la situación de las industrias”.
Ante esta situación, la CIEC junto al resto de las cámaras que agrupan al sector industrial insisten en solicitar al Ejecutivo las condiciones necesarias que generen confianza en los empresarios que quieran invertir y que les permita a los propietarios continuar produciendo los bienes y servicios que requieren los venezolanos
Actualmente las compañías que están trabajando son las prioritarias, pertenecientes a los sectores de alimentos y medicinas. Según el representante regional de los industriales, en Carabobo estas empresas operan a entre 15 y 20% de su capacidad instalada. “Las otras están trabajando bajo el esquema de 7×7, que debilita mucho a la industria”.
Las empresas agrupadas por la CIEC que se mantienen operativas, trabajan bajo la implementación de un protocolo para asegurar la salud de los colaboradores. El presidente de la cámara afirmó que “todo trabajador que va a la industria está seguro de que realmente la empresa para la cual labora está trabajando por su seguridad, para que no exista ningún tipo de contagio”.
Congreso Conindustria 2020
Este año, debido a las restricciones propias de la cuarentena por la pandemia de COVID-19, el congreso de Conindustria se realizó a través de plataformas digitales este martes 30 de junio, en el marco de la celebración del Día de la Industria.
Entre los panelistas estuvieron Moisés Naim, escritor y columnista; Lorenzo Mendoza, presidente ejecutivo de Empresas Polar; Adán Celis Michelena y Francisco Acevedo, presidente y primer vicepresidente, respectivamente, de la confederación, quienes abordaron diversos temas respecto a la situación de las industrias y la economía en Venezuela.
Celis Michelena, quien fue el encargado de las palabras de apertura, resaltó que los empresarios continúan comprometidos con el país, a pesar de que la industria venezolana está minimizada en más de 90%. “Deseamos llenar el país de empresas productivas y trabajar en equipo”, dijo.
“La economía que vivimos hoy, de puertos, de bodegones, tiene que cambiar a una economía hecha en Venezuela, de productos venezolanos y de creación”, insistió el vocero de Conindustria.
