Dayrí Blanco | @DayriBlanco07
«La clase es la calle», ese es el lema de los estudiantes de la Universidad de Carabobo (UC) que se niegan a dejar a un lado la protesta activa. Por eso decretaron la mañana de este jueves al Arco de Bárbula como el punto de manifestaciones continuas y pacíficas.
Ahí estarán a diario. Con pancartas, banderas y consignas hasta que se restituya el hilo constitucional en el país y cesen las represiones, detenciones arbitrarias y asesinatos durante las protestas.
Ese fue el acuerdo al que llegaron diferentes movimientos estudiantiles de la institución y la Federación de Centros Universitarios (FCU). «Generaremos agenda de calle y le solicitaremos al Consejo Universitario la flexibilización plena y suspensión del control de asistencia y de las evaluaciones de manera indefinida hasta que se logren los objetivos de esa lucha de calle», aseguró Ayham Alchouhuf, representante estudiantil.
Durante la tarde del miércoles en CU se decidió reiniciar actividades académicas tras siete días de paralización. Iván Uzcátegui, presidente de la FCU, apoyó a la dirigencia estudiantil y aseguró que las labores administrativas no pueden verse interrumpidas porque eso atentaría contra el cumplimiento de compromisos económicos con toda la nómina de la UC.