Las provincias de Mérida, Trujillo, Barinas, Cumaná, Barcelona y Margarita, apoyaron a Caracas a partir del movimiento realizado el 19 de abril de 1810.

No se plegaron las provincias de Guayana, Coro y Maracaibo manteniéndose fieles a la causa realista.

De estas tres, Guayana fue liberada en 1817 con las acciones de la batalla de San Félix el 11 de abril y las capturas de las fortalezas de Angostura y Guayana La Vieja en julio y agosto.

En Maracaibo la «Escuela de Cristo», era un grupo clandestino que se reunía en el Templo de Santa Ana, con el propósito de conspirar contra las autoridades españolas.

Estaban comprometidos importantes personalidades civiles, militares y eclesiásticos.

En la profética Carta de Jamaica escrita el 6 de septiembre de 1815, nuestro Libertador propuso lo siguiente:

“La Nueva Granada se unirá con Venezuela, si llegan a convenirse en formar una República central, cuya capital sea Maracaibo, o una nueva ciudad que con el nombre de Las Casas, en honor de este héroe de la filantropía, se funde entre los confines de ambos países, en el soberbio puerto de Bahía Honda”.

El 21 de enero de 1821, desde Trujillo, el general Rafael Urdaneta, envió a Maracaibo al comandante Rafael José de las Heras con el batallón Tiradores en apoyo al inminente suceso emancipador.

El gobernador y comandante militar Francisco Delgado, recibió noticias de Don Antonio Castro sobre la aproximación de las fuerzas republicanas.

Delgado al leer el documento entregado por Antonio Castro exclamó:

¡Viva Colombia!.

Inmediatamente se trasladaron al Ayuntamiento.

Delgado apareció en el balcón y ante el pueblo declaró a Maracaibo y su provincia, libre y unida al gobierno de la Gran Colombia.

“El muy ilustre Ayuntamiento de esta ciudad de Maracaibo, a 28 de enero de 1821, reunido en Cabildo Abierto en la Sala Consistorial, para tratar y resolver lo que sea más conveniente a la salud pública, orden y gobierno de este pueblo; después de discutir y conferenciar lo que cada uno de sus individuos tuvo a bien exponer sobre el tocado objeto, teniendo en consideración que siendo la primera más noble en su representación, poner y restituir al pueblo en el uso y goce de su libertad soberana; acordó este muy ilustre Ayuntamiento:

«Declarar al pueblo de Maracaibo, libre e independiente del gobierno español, cualquiera sea su forma desde este momento en adelante; y en virtud de su soberana libertad se constituye en República de Colombia, defiende su libertad e independencia según las leyes imprescindibles de la naturaleza.

Publíquese el presente acuerdo por bando a son de Caja, (tambor), repiques de campana y todas las demostraciones de gozo y alegría que tenga a bien prevenir el ciudadano Francisco Delgado, a quien provisionalmente y hasta que la autoridad de la República organice el gobierno de este pueblo, se le encargó a nombre de él, del gobierno político, militar e intendencia, para que sostenga su libertad independencia y cuide de su seguridad y tranquilidad”.

Francisco Delgado, hermano de Juan Evangelista y José María, prominentes miembros del movimiento independentista de Maracaibo, escribió a Bolívar:

“Todas las clases sociales del pueblo han hecho las demostraciones más vivas y sensibles de gozo y alegría, testificando su adhesión a la República”.

El mariscal Miguel de La Torre, al mando supremo de las fuerzas realistas en sustitución del general Pablo Morillo cuando éste regresó a España, protestó por lo sucedido y lo denunció al Libertador como una flagrante violación del Tratado del Armisticio firmado por Bolívar y Morillo el 26 de noviembre en Trujillo.

El Libertador argumentó que:

“no podía impedirse a un pueblo entero que se acogiera a la protección de nuestras armas”.

No habiéndose logrado ningún acuerdo entre ambos bandos; de mútuo acuerdo se convino en declarar roto el Armisticio, fijándose el 28 de abril como fecha de reinicio de las hostilidades.

Maracaibo contribuyó a la independencia de Venezuela de una manera decisiva, pues al reiniciarse las hostilidades, el «Siempre Leal» general Rafael Urdaneta al frente de casi dos mil efectivos, incluyendo a setecientos jóvenes aguerridos del recién creado «Batallón Maracaibo», salió el 28 de abril para materializar la liberación de Coro el 11 de mayo.

El Batallón Maracaibo luego de combatir exitosamente en Cocorote, pasó a las órdenes del coronel José de La Cruz Carrillo, para ocupar San Felipe el 20 de junio, obligando al general realista Miguel de La Torre, a enviar de urgencia a esa ciudad el 22 de junio, dos batallones que no pudieron estar presentes en la magna batalla del 24.

Varios oficiales participaron por la independencia del Ecuador y Perú.

En el 2002 se declaró al 28 de enero:
«Día la Zulianidad».

Nuestro Libertador el 20 de noviembre de 1817, decretó la Octava Estrella en la gloriosa Bandera por la Liberación de Guayana, le faltó igual designación de la Novena Estrella por la liberación de esta importante Provincia de Maracaibo y por su valioso aporte emancipador, reflejado por el gran «Bardo Marabino» Udon Pérez.

El pensador ginebrino Juan Jacobo Rousseau dijo:

» La libertad es un alimento suculento pero de difícil digestión».

Eumenes Fuguet Borregales.
eumenes7@gmail.com




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