Cumpliendo con la fase de la Concentración Estratégica del Ejército Libertador, «el Centauro» José Antonio Páez, salió desde Achaguas el 10 de marzo de 1821, avanzando inicialmente hacia Mijagual – Barinas, luego Guanare y por último San Carlos, adonde llegó con su caballería el 7 de junio y la infantería el 11.
Mil infantes y quinientos jinetes recorrieron un total de 610 kilómetros, en plena estación lluviosa.
El cruce del río Apure fue realizado por el Paso Enriquero.
Además llevaba cuatro mil reses y dos mil caballos.
Triunfaron en la memorable Batalla de Carabobo el 24 de junio de 1821.
Páez fue ascendido a general en jefe, es uno de los once de la Venezuela Heroica.
En Achaguas, hoy capital del municipio del mismo nombre, sin conocer el destino final de su movimiento, antes de salir rezó en la humilde capilla y prometió donar un Nazareno.
Para cumplir lo ofrecido, el «Taita Páez» en 1833, solicitó la talla al pintor y escultor caraqueño José de la Merced Rada, hijo de un ebanista.
La maravillosa obra elaborada con madera y yeso fue colocada en Achaguas en 1835.
La figura tiene 1,80 metros de altura; la Cruz 2, 70 metros de largo y 1,40 el palo menor.
Se le atribuyen muchos milagros, es visitado por miles de feligreses, especialmente durante la Semana Santa, cuando es sacado en Procesión el Miércoles Santo en horas de la tarde por miles de apureños y visitantes.
Achaguas está ubicada a ochenta kilómetros de distancia de San Fernando de Apure.
La Santa Imágen fue declarada en abril del 2014:
«Patrimonio Cultural de Venezuela:.
Al Santo Nazareno de Achaguas, le pedimos por la salud del mundo entero.
Qué así sea.
Eumenes Fuguet Borregales.
eumenes7@gmail.com
