Tensión, frustración y muchas otras emociones son las que provocan los poco más de cuatro minutos que dura el cortometraje La Verdad, una pieza con un mensaje enfocado en las fuerzas armadas de Venezuela.
Ambientado en las protestas postelectorales, narra una conversación entre una mujer que presencia una represión violenta y su hijo, un uniformado de la Guardia Nacional.
El director de la obra, Alejandro Solanilla, dijo en entrevista concedida a El Carabobeño que el objetivo de es que el contenido llegue a los militares del país. “Todos estamos sufriendo, todos la estamos pasando la mal, ¿qué más hay que esperar?”.
La frustración de no poder luchar en las calles de Venezuela al estar como migrante en Estados Unidos, fue su inspiración. Además de alzar la voz porque no pueden hacerlo dentro del país.
El título “La Verdad” se refiere a que existe solo una, aunque se trate de ocultar. Solanilla señaló que los funcionarios y sus familiares también enfrentan la misma realidad del resto de los venezolanos, y por eso el mensaje es para ellos.
El mayor desafío que tuvo durante la realización del cortometraje fue el riesgo al que se expuso todo el equipo, basado en la censura impuesta en Venezuela. También hacer el trabajo con la actriz Elba Escobar, a quien agradeció por aceptar la propuesta. “Sé que es muy delicado y que no todo el mundo está dispuesto a jugársela, pero ella leyó el guion y me dijo que sí, que quería ser parte de esto, que ella también quería hablar de esto”.
La Verdad sin fines económicos
Este es un proyecto profesional que asumió por completo el director, con la meta de que el mensaje llegue a todos los venezolanos, dentro y fuera del país, que les toque el corazón y hacerlos reflexionar.
La obra fue grabada una parte en Puerto Rico y otra en Estados Unidos en jornadas de ocho hora por dos días. “Todo fue financiado por mí y lo logré con pocos recursos y el apoyo de amigos”.
“La Verdad” se estrenó este jueves 5 de diciembre en YouTube y cualquier persona puede verlo de forma gratuita.
Un carabobeño que sueña en grande
Mientras estudiaba artes audiovisuales en la Universidad Arturo Michelena de Carabobo en 2014, participó activamente en las protestas de calle. En ese momento hizo un cortometraje sobre las personas que se iban del país y ese sentimiento de que quizás no volverían. Luego le tocó vivir esa experiencia al irse a Norteamérica donde comenzó a trabajar en diferentes áreas hasta que llegó la oportunidad de hacer lo que le apasiona.
Fue así como realizó el documental “La Voz de los Migrantes”, junto a Sergio Noel y Adrián Salas, que fue la primera pieza de este tipo de otras que ha hecho. También ha dirigido videos musicales y comerciales. Su sueño es hacer un largometraje en Venezuela.
Durante sus años en el exterior ha conocido a muchos venezolanos que trabajan en grandes proyectos. “Existe un club gigante de personas demasiado talentosas de nuestro país que están detrás de proyectos que jamás te imaginarías”.