Una crisis política sobre el liderazgo en el territorio estadounidense del Caribe de Puerto Rico dio otro giro el domingo, cuando el sucesor designado del gobernador asaltado Ricardo Rossello dijo que no quería el puesto.
La secretaria de Estado Wanda Vázquez, la número dos de Rosselló, fue establecida bajo la Constitución para asumir el 2 de agosto como gobernadora interina de la isla, que está sujeta a una recesión de una década.
Luego de dos semanas de protestas callejeras provocadas por comentarios en los que se burlaban los homosexuales, las mujeres y las víctimas de huracanes, Rosselló confirmó por escrito el jueves que renunciaría.
«Me gustaría subrayar que no estoy interesado en el puesto de Gobernador», dijo Vázquez, en español, en Twitter.
«Espero que el Gobernador identifique y nombre a un (nuevo) candidato para el cargo de Secretario de Estado antes del 2 de agosto. Y se lo he dejado claro», dijo.
Mientras los puertorriqueños se regocijaban con la partida de Rosselló, muchos querían un liderazgo completamente nuevo para el territorio, cuyos residentes son ciudadanos estadounidenses.
Dijeron que los que tienen vínculos estrechos con Rossello están contaminados, y un hashtag en las redes sociales #WandaRenuncia pidió que renunciara.
Las manifestaciones de protesta comenzaron el 13 de julio, cuando el Centro para el Periodismo de Investigación publicó 889 páginas de conversaciones de texto en la aplicación de mensajería cifrada Telegram.
En los textos, Rosselló y otros 11 miembros de la administración masculina se burlaron de las mujeres, los homosexuales, las víctimas del huracán María en 2017, los periodistas y otros políticos.
Entre los que hicieron bromas homofóbicas fue el cantante pop de San Juan, Ricky Martin.
Los mensajes fueron vistos como la última gota dolorosa para las personas hartas de años de estancamiento económico, corrupción, mala administración del gobierno y un lento y descuidado esfuerzo de recuperación después de María, que mató a casi 3.000 personas en septiembre de 2017.
Algunos pasaron meses sin agua corriente ni electricidad después del desastre.
Tres días antes de la publicación de esos chats, los fiscales acusaron a seis ex funcionarios del gobierno de malversar $ 15 millones en dinero para la reconstrucción de huracanes.
La isla ya estaba bajo protección por bancarrota y miles de millones de dólares en deudas cuando azotó el huracán.
Alrededor del 44 por ciento de las personas en la antigua colonia española viven en la pobreza.
A medida que las protestas se fortalecieron, Rossello se disculpó y dijo que no se postularía para la reelección el próximo año, pero inicialmente se negó a renunciar.
Pero la presión en su contra aumentó, y recibió noticias del Congreso de que sería acusado. Finalmente se rindió. AFP
