El liceísta Wilson Jesús Salazar Orozco (15) murió tras recibir un tiro en el pecho, al quedar atrapado en la línea de fuego durante un intercambio de disparos entre un colectivo y tres delincuentes que intentaban despojarlo de su moto KLR de alta cilindrada, en el sector Colinas de Plan de Manzano, carretera vieja Caracas-La Guaira.
Visiblemente consternado su padre, Wilson Salazar, dijo que el adolescente estaba conversando con una muchacha, el lunes a las 8:00 p.m., cerca de su vivienda, cuando se registró el suceso. El piensa que su hijo intentó correr para resguardarse, pero ya había sido alcanzado por un proyectil.
El padre estaba en su vivienda y escuchó las detonaciones, salió y logró abrazar a su muchacho aun con vida, para llevarlo al hospital Periférico de Catia. «Era tarde, no tenía salvación y a las 8:50 p.m. falleció».
Salazar pidió justicia, que las autoridades capturen a los demás responsables, que el detenido hable y diga quienes son los otros dos.
Durante el enfrentamiento entre el hombre armado y sus atacantes, el y uno de los ladrones resultaron heridos también. El colectivo está delicado de salud, porque le impactaron siete tiros, pero la mayoría pudo ser neutralizada por el chaleco antibalas. Dos balazos lo perforaron en un brazo y la cara. El antisocial fue baleado en un brazo y lograron capturarlo, pero sus dos acompañantes escaparon.
Wilson cumplió 15 años el 4 de julio, pasó a 4º año de bachillerato en el liceo Fidel Jesús Orozco y era el segundo de cuatro hermanos.
Su profesor de matemáticas, Víctor Martínez, estaba apoyando a los familiares en la morgue, y lo recordó como un muchacho excelente, respetuoso, buen estudiante, de buena familia, muy colaborador.
Aunque este tipo de asesinatos no son frecuentes en Plan de Manzano, el docente lamentó que por la inseguridad personal y otros problemas que afectan al país, haya fuga de cerebros y los mejores se estén yendo a otros destinos.
