El comisionado para la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Miguel Pizarro, presentó el primer Boletín de la Verdad: Condiciones para atender COVID-19 en Venezuela.
Este primer boletín oficial responde a la obligación de comunicación a los ciudadanos venezolanos la verdad, ante las desinformaciones que emite el régimen, recalcó en el Centro de Comunicación Nacional.
El documento intenta reflejar una realidad en el país, que dista de lo expuesto por los organismos del régimen, en el desarrollo de la cuarentena nacional por la llegada del coronavirus al país, tras asegurar que un 62% de los hospitales en Venezuela no cuentan con agua, o tienen agua intermitente una vez a la semana; y además existe 52% de desabastecimiento en medicamentos de emergencia.
A continuación el comunicado íntegro:
En atención de la política de transparencia, nosotros como Gobierno legítimo nos vemos en la obligación de comunicar al país la verdad ante mentiras del régimen en función del interés nacional.
El vocero de la dictadura, ha intentado mantener una imagen de estabilidad, hablando de un sistema de salud “preparado y suficiente”, nada más alejado de la realidad: la realidad en Venezuela es que 62% de los hospitales no cuentan con agua o tienen agua intermitente una vez a la semana; y además existe 52% de desabastecimiento en medicamentos de emergencia.
La realidad es que no hay camas suficientes para atender la epidemia. Las camas en centros hoteleros no cuentan con los protocolos de cuidado a pacientes ni equipos de protección personal. Nuestros médicos no tienen los insumos necesarios para atender estas patologías.
60% de los hospitales no tiene jabón para lavarse las manos; 76% de esos centros de salud no cuentas con insumos como guantes y mascarillas; el porcentaje de desabastecimiento de en medicamentos de emergencia en nuestro país supera el 51%.
Cuentan las camas de terapia intensiva de los CDI del sistema barrio adentro y nos preguntamos, ¿quiénes van a atender los pacientes allí si no hay personal médico en esos centros? Los CDI han sido catalogados por agencias internacionales como los centros de salud menos dotados, más peligrosos y más vulnerables de la región.
Esta crisis no puede ser superada con falsas realidades, las cifras no deben ser maquilladas, el venezolano merece estar informado, y este es un derecho que no puede ser vulnerado una vez más.
Superar esta pandemia, se trata de salvar vidas. Y hoy, salvar vidas depende de la consciencia, la voluntad política, la solidaridad, empatía y la humildad. Depende de cada uno de nosotros.