Los docentes esperan por sus productos. (Foto cortesía).

Ni siquiera la Defensoría del Pueblo ha ayudado a los 1200 docentes que en Carabobo esperan por sus productos del programa Mi Casa Bien Equipada, desde hace cuatro años, pese a que están cancelados.

Los afectados se conformaron en comités municipales, para tratar de buscarle solución al problema. Parte del comité de Naguanagua visitó El Carabobeño, para denunciar la situación que los afecta. Estuvieron en el diario Clemencia Mendoza, Delhi Vasquez, Mario Ramos, Teresita Guerra, Alexandra Sanchez, Yasmelis Muñoz, Aura Gil, Maria Marquez, Yelegni Mujica y Doris Melendez,

El vocero, Mario Ramos, señaló que la compra de los productos se hizo a través del Ipasme, pero este organismo se ha tornado indiferente, ante las exigencias del sector educativo.

Dijo que los docentes se sienten burlados,  pues a pesar de haber cumplido con todos los requisitos, todavía no han obtenido respuestas.

Precisó que el caso ha sido planteado ante la Fiscalía Anticorrupción, la Defensoría del Pueblo y ante el Ministerío de Educación, pero la situación se mantiene invariable.

Ramos refirió que recientemente se hizo la entrega de unos productos, pero los beneficiarios conformaron un grupo muy reducido. El resto sigue esperando sus lavadoras, neveras, aires acondicionados, cocinas o televisores.

Subrayó que de los 1200 docentes que esperan los productos, 80 residen en Naguanagua. En el resto del país también hay un buen número de educadores esperando por los productos.

Asimismo señaló que anteriormente los docentes eran atendidos por el profesor Dámaso Pérez, en el Ipasme, e incluso organizaron un cronograma de entregas, pero misteriosamente el funcionario fue removido del cargo.

Según Ramos, lo mismo ocurrió con el fiscal 13 anticorrupción, que recibió la denuncia de los docentes, por lo que ahora esperan respuesta del nuevo funcionario que designaron.

Esta instancia debe investigar el hecho de que algunos docentes aparecen como que recibieron el producto, pese a que esto no ha ocurrido.

Dhelis Vasquez, aseguró que su padre, Omar Vásquez, es víctima de esta situación, porque en el Ipasme aparece como que recibió una nevera y eso es completamente falso. La pagó de contado hace cuatro años y todavía la está esperando.




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