Se espera levantar dos metros más a la cota que tiene el dique de contención en Aragua. (Foto César Pérez)
Luisa Quintero
Con la llegada de las lluvias, el embate del Lago de Valencia en el estado Aragua se hace evidente. Para solventar el problema, se espera que para finales de noviembre o principios de diciembre se culmine el refuerzo del muro de contención en la zona, así lo aseguró el ingeniero encargado de la obra, Geober Ortega.
Ortega indicó que las obras se iniciaron el martes 12. Se espera levantar dos metros más para evitar que las aguas rebasen el dique construido desde hace varios años, por lo cual se pretende abarcar entre mil 800 y dos mil metros de distancia.
Para realizar este proyecto se están empleando bolsas biodegradables rellenas con concreto hormigón de resistencia 150, detalló el ingeniero. Los materiales son suministrados por Pdvsa Industrial que también financia la obra. Se emplean alrededor de 5 trompos diarios de cemento, por cada trompo, se pueden llenar tres sacos y medio.
El encargado explicó que al finalizar el muro se tienen pensado recubrir con asfalto la cresta y el borde del talud para evitar la erosión. Hasta los momentos se mantienen 80 empleados y obreros trabajando en la obra que beneficiaría a los sectores de La Punta y Mata Redonda en el municipio Girardot.
Promesas incumplidas
Luego de un decreto de expropiación y promesas del Gobierno nacional y regional para reubicar a los habitantes de La Punta y Mata Redonda, todavía algunas personas permanecen en estas comunidades en espera de una respuesta concreta y que se ajuste a sus necesidades.
Se presume que en Mata Redonda queda un promedio de 600 familias y alrededor de 32 en La Punta, según algunos vecinos. El resto se ha ido por problemas de inseguridad, aguas negras y las inundaciones durante las lluvias.
El gobernador de Aragua, Tareck El Aissami, prometió en abril de 2013 la reubicación de dos mil 500 familias que se encontraban desde 2012 en calidad de refugiados.
Aún así, quedan vecinos en el urbanismo además de invasores que buscan obtener una vivienda propia por permanecer en el sitio. Algunos no han aceptado ofertas de vivienda porque no son dentro de Aragua, donde tiene sus trabajos o estudian sus hijos.
