El Bayern Múnich y el Bayer Leverkusen se verán las caras este sábado en la final de la Copa de Alemania, en donde los bávaros buscarán el doblete, mientras que el equipo de ‘Las Aspirinas’ quieren obtener su primer título desde 1993.
Los dirigidos por Hansi Flick buscarán seguir siendo los dominadores del fútbol germano, luego de haber ganado la Bundesliga por octava temporada consecutiva. La buena noticia para el cuadro muniqués es la vuelta de Thiago Alcántara, que estará a disposición de Flick y se sumará a los Lewandoski, Muller, Kimmich y compañía.
El Bayern Múnich es el gran favorito para llevarse un trofeo que ya levantaron la pasada temporada. De las últimas siete ediciones de la Copa de Alemania, cuatro han terminado en las vitrinas de los bávaros. Además, el rendimiento del campeón de la Bundesliga tras el parón por el coronavirus ha sido demoledor: nueve victorias en nueve partidos disputados, incluyendo duelos complicados contra el Borussia Dortmund o el propio Bayer Leverkusen, al que vencieron 4-1.
Por su parte, el Bayer Leverkusen quiere volver a «tocar metal» tras 27 años de espera. De vencer mañana, lograrían la segunda copa alemana de su historia. Sin embargo, el equipo de las aspirinas no ha tenido suerte en las fases finales, quedando como segundo clasificado en cinco ocasiones de la Bundesliga y siendo subcampeones en dos finales coperas y una final de la Champions League.
Los dirigidos por Peter Bosz se agarran a su joven estrella, Kai Havertz, que es una de las grandes promesas del fútbol germano y europeo. El presidente de honor del Bayern, Uli Hoeness, ya avisó que si Havertz tiene su día «el Leverkusen puede ganar a cualquier equipo».
De esta manera, se presentarán ambos equipos en una final atípica en el que las gradas del Olympiastadion de Berlín serán testigos de un partido en el que parece haber un gran favorito… pero en el que todo puede pasar. Tras este encuentro, se cierra el telón en Alemania, la primera liga que volvió en épocas de coronavirus.
