Un llamado a las autoridades a respetar la vida de quienes están bajo su responsabilidad, formuló la Comisión de Justicia y Paz de la Conferencia Episcopal Venezolana, en un comunicado difundido la noche de este miércoles a propósito de los sucesos en El Helicoide, que aún mantienen en expectativa a la sociedad venezolana.
Monseñor Roberto Luckert, presidente de la Comisión de Justicia y Paz de la CEV, en un comunicado que suscribe junto al presbítero Saúl Ron Braasch,
vicario general de Justicia y Paz, señala lo siguiente: «Ante los acontecimientos acaecidos en el día de hoy en El Helicoide, donde se encuentran recluidos ciudadanos y ciudadanas por cuestiones de índoles política, la Comisión de Justicia y Paz de la CEV hace un llamado a las autoridades a respetar la vida de quienes están bajo su responsabilidad al encontrarse en instituciones del Estado Venezolano, a respetar los Derechos Humanos de todos y a buscar una salida pacífica a la problemática».
Los prelados, antes posibles situaciones que se puedan lamentar, recordaron al Estado su responsabilidad frente a la vida y a la integridad de todas las personas detenidas. «Velar por los Derechos Humanos es obligación inexcusable e intransferible de los gobiernos, que no pueden estar subordinados a los hechos punibles que se persiguen».
En el escrito, piden a la Fiscalía General que vele por todos los detenidos, menores, mujeres y presos políticos, e investigue las denuncias de torturas realizada por los familiares.
Al Gobierno Nacional le piden que escuche las peticiones de los detenidos, haga cumplir las órdenes de excarcelación, y mejore las condiciones de reclusión de los privados de libertad.
A los funcionarios policiales les recuerdan los jerarcas de la Iglesia Católica que los delitos en contra los derechos Humanos no prescriben. «Toda Persona privada de libertad será tratada humanamente y será respetada su dignidad. Artículo 10 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos», reza el comunicado.
