Muchos hombres le temen a la impotencia o disfunción eréctil a medida que van envejeciendo. Sienten que se van acercando al momento de dejar atrás su vida sexual o que van a ser dependientes de medicamentos que los haga más potentes. Lo que no saben es que hay factores en su día a día que pueden evitar para tener una vida sexual más prolongada.
La respuesta sexual tiene 3 fases: deseo, erección y orgasmo. Y existen sustancias como el tabaco/cigarrillo y el alcohol que pueden impactar en su adecuado desenvolvimiento. Les enseñaré cómo pueden afectar en estas fases de su vida sexual.
Unos cigarritos… Para tener una erección se necesita un aumento en la circulación sanguínea efectiva hacia el área genital. El cigarrillo disminuye esta circulación efectiva en todo el cuerpo, dañando pequeños vasos genitales, y por ende, interfiriendo en diferentes procesos biológicos necesarios para iniciar y mantener la rigidez peneana. Un estudio publicado por la Revista Urology (Hirshkowitz 1992) evaluó la dureza y duración de las erecciones durante el sueño (tumescencia peneana nocturna), concluyendo que mientras más cigarrillos fumaba el hombre durante el día, menos rígidas y duraderas eran sus erecciones durante la noche.
Entonces, ¿dejar de fumar me ayudaría? Sí! La Revista Endocrine Practice (Guay 1998) demostró en 10 fumadores que no fumar durante 24 horas resultaba en erecciones más rígidas. Ahora bien, ¡imagínense si dejan de fumar del todo! El British Journal of Urology (Pourmand 2004) dio a conocer un artículo comparativo entre personas fumadoras y exfumadoras desde hace 1 año, observando mejoría de la disfunción eréctil en el 25% de los exfumadores y 0% de los fumadores, pero es importante tomar en cuenta que mientras mayor ha sido el tiempo de exposición al cigarrillo menor va a ser la reversibilidad o mejoría de la disfunción!
Salud! Si bien es cierto que en muchas ocasiones el consumo de alcohol facilita y precede la actividad sexual, ya que actúa como desinhibidor social, haciendo a la persona más abierta y receptiva; les comento que la creencia que el alcohol es un afrodisíaco que potencia o intensifica la relación sexual, es falsa. Para poder entender mejor, deben saber que estas bebidas actúan sobre el sistema nervioso central, enlentecen nuestras funciones cerebrales, la respiración y la circulación, llevando a disfunción eréctil y disminución de la lubricación vaginal.
Una revisión dada a conocer por la Revista Urology Science (Jian 2010) revela que el consumo crónico y/o en grandes cantidades de alcohol aumenta el riesgo de sufrir impotencia a edades más tempranas, y pudiera no ser reversible por el daño neurológico causado. De igual manera reporta que tomar 1-3 onzas de alcohol a la semana pudiera resultar beneficioso para mantener una vida sexual saludable.
Así que ya saben, unas pocas copas y a dejar de fumar!
