Todo parecía estar bajo control. Unos policías revisaron muy bien a todos los pasajeros y sus equipajes antes de abordar la unidad de Expresos del Sur que salía del terminal en Barquisimeto con destino a Puerto Ordaz. Pero algo falló: Cuando llegaron a Valencia el buscama fue secuestrado por sujetos armados.
Era la noche del 11 de diciembre cuando el autobús salió de Barquisimeto. En Nirgua hizo una primera parada donde todos los pasajeros bajaron de la unidad. Presumen que allí les dieron las armas a dos hombres que viajaban en la parte trasera.
Al llegar a Valencia, alrededor de las 12 de la noche, posiblemente en territorio conocido para los delincuentes, dos «pasajeros» se levantaron de sus asientos e informaron que se trataba de un asalto cuando pasaban por la Autopista Regional del Centro, cerca del Centro Comercial Metrópolis. Justo donde se bajaría Luis*, un usuario.
Uno de los dos delincuentes en el buscama se acercó al conductor. Lo apuntó con un revólver y bajo amenaza de muerte lo obligó a detenerse para que subiera otro par de maleantes, quienes bajaron de un vehículo que los seguía. Luego, le indicaron que tomara la variante Yagua – San Diego.
Los cuatro antisociales comenzaron a despojar de sus pertenencias a todos los usuarios del Expreso. Revisaron las partes íntimas de los hombres, buscaban dólares. Cometieron actos lascivos contra una joven viajera. Amenazaban con disparar a quien no entregara sus cosas, contó Luis*.
Llegaron al retorno cerca de la E/S Bosqueserino, mejor conocida como Church’s Chicken, y retomaron el camino hacia la variante Yagua. Ese recorrido lo hicieron dos veces. El carro que acompañaba a los delincuentes siempre se mantuvo detrás del bus. Entre la oscuridad de esa vía y sin poder hacer algún movimiento nadie pudo ver las características del vehículo donde iba otro cómplice de la banda, que por la manera de actuar, parece tener vasta experiencia.
Los asaltantes bajaron de la unidad en la variante, cerca de La Cumaca. Cargaron con cuatro bolsos repletos de dinero, teléfonos, relojes y joyas. El secuestro duró dos horas. Nunca pasó una patrulla de la Policía. Luis*, estima que los atracadores cargarían en total con unos 15 mil dólares. Solo a un pasajero le quitaron $1000 en efectivo, que llevaba destinado para la operación de un hijo.
Por la manera como ocurrieron los hechos, posiblemente se trate de la misma banda que hace pocos días secuestró y robó a los pasajeros de otro buscama que iba con destino al Táchira en la que, aparentemente, los antisociales subieron en La Cabrera, municipio Diego Ibarra.
*Nombre falso para proteger la verdadera identidad de la víctima.
