El diseñador de moda venezolano Jackson De La Peña, a sus 42 años continúa firmemente dedicado a la creación de sus diseños de Alta Costura, tanto para damas como para caballeros.
En su larga trayectoria ha vestido a más de 100 artistas venezolanos como Stefanía Fernández, Gabriela Spanic, Hilda Abrahamz, Caridad Canelón, María Antonieta Duque, Sthefany Gutiérrez o Javier Vidal.
El modista, que pasó algunos años fuera del país para trabajar desde Nueva York, México y Colombia donde se establecen los principales clientes que visten su firma, se encuentra de nuevo en su natal Maracaibo.
En la capital del estado Zulia se encuentran ubicados sus dos talleres de moda. El primero es una escuela de corte y costura, y el segundo es un espacio donde se confecciona Alta Costura y se fabrican piezas de otros diseñadores a nivel nacional.
De la Peña resalta que la particularidad de su taller es que cada pieza que hace su firma, tanto para su clientela nacional como internacional, es confeccionada por mujeres guajiras que son expertas y sofisticadas en su área.
El diseñador anunció que tiene lista su colección 2022 que posee como imágenes principales a la Miss Venezuela Mundo 2009, Adriana Vasini y a la presentadora de televisión y ex reina de belleza, Andreina Castro.
Una moda para una mujer con cuerpo de mujer
Actualmente el venezolano trabaja en la creación de su colección primera – verano 2023 y está montando la maqueta para futuros proyectos. “Nunca se trabaja en el año en función, siempre voy muy avanzado y voy diseñando para el futuro”.
Para el diseñador la moda suele ser banal, pero él considera que todas las mujeres son hermosas y por esta razón planea una colección inclusiva y diversa.
Una moda para una mujer con cuerpo de mujer. Así define Jackson De la Peña los nuevos diseños que van dirigidos a mujeres latinas, que tienen caderas y que se quieren sentir empoderadas, libres y sofisticadas. “Internacionalmente las grandes casas de moda han cambiado sus prototipos, y en Venezuela apenas se está iniciando esta expansión del lenguaje del modelaje”.
Líder social
Jackson De la Peña además de tener estudios en Londres, Barcelona y Nueva York, y ser Periodista egresado de la Universidad Católica Cecilio Acosta, también tiene un gran sentido social y eso lo ha llevado a dirigir la Fundación Creando Futuro.
Desde la fundación que ha estado presente durante los momentos más álgidos del país se ha servido a un gran número de personas con diferentes necesidades, se ha brindado apoyo a la Cruz Roja venezolana y realizan visitas en ancianatos para llevar mensajes de amor y esperanza.
Como persona con asperger, De La Peña también se involucra en proyectos relacionados. Para el día mundial de la salud organizó un encuentro que reunió a más de 700 personas en Maracaibo, donde los asistentes disfrutaron de diferentes actividades. “Las personas que tenemos alguna condición o discapacidad somos capaces de generar amor y conseguir dejar la exclusión a un lado. Todos somos iguales y tenemos algo que dar, y eso es lo que me propongo en mi día a día”.
Acontecimiento del año 2018
Durante la primera semana de abril el diseñador venezolano vivió un episodio que le recordó una difícil situación que enfrentó hace 4 años.
Todo sucedió mientras se encontraba en el aérea de la piscina del Hotel Kristoff de Maracaibo y se le acercó un guardia de seguridad que lo acusó de estar suplantando la identidad de Jackson De la Peña, porque según medios de comunicación él había muerto en el año 2018.
Tras el incidente, De la Peña dice que es difícil debatir con la gente sobre este tipo de noticias, pero él siempre trata de tomarlo con la mejor actitud.
Aquella noticia surgió una madrugada del año 2018 cuando del Bar Club House en la avenida Cecilio Acosta con avenida 10 de Maracaibo salieron unos sujetos armados que se identificaron como funcionarios del CICPC y le dieron una golpiza que lo dejó con la dentadura muy frágil y luego le dispararon en su pierna derecha, dejándole graves heridas.
Hasta el día de hoy nadie ha respondido por lo sucedido y la investigación sigue en curso en fiscalía. De la Peña aún sufre las consecuencias de aquel suceso y mantiene un costoso tratamiento médico mientras se dedica a sus labores del mundo de la moda y ayudas sociales.
