Director-Carl-Zitelmann-y-el-actor-Socrates-Serrano. (Foto-Gustavo-Velutini)

@cinefilo50

Una nueva producción del connotado y Rodolfo Cova llega a los cines  de Venezuela, bajo el título de “El vampiro del lago”. Thriller policial con pequeñas dosis de suspenso, horror y lo sobrenatural, ya que la historia se divide en tres tiempos, comienzos del Siglo XX, año 1975 y 2016. Marcados por una serie de enigmáticos crímenes numéricos, cometidos por tres personas distintas, a los cuales se les llama “vampiros”, quienes obedecen un patrón maligno venido del más allá, cuyos móviles están relacionado con la sangre y muertes atroces.

“El vampiro del Lago” marca el debut en la dirección cinematográfica de Carlo Zitelmann, quien estudió cine en la National Film and Television School de Londres, hacia finales de los años noventa y comienzos del Siglo XXI.

Sus comienzos tras las cámaras ocurre en el 2002, con el corto “Autómata”, un animado que no solo dirigió, sino que escribió, produjo y editó, en territorio venezolano.

Luego, realiza el corto “Temerario”, también del género animado, bajo la producción de la National Film and Television School, en 2006. En el 2008 rueda “Heavensong”, un corto inmerso en el género del horror.

Tanto en el 2009 y 2013, Carl Zitelmann trabaja en Venezuela, continuando su periplo por el mundo de los cortos al filmar “Ritual” (con guión de Rafael Velásquez Stanbury) como el animado “Flamingo”, la que también produjo y coescribió con César Elster, con éste último Carl se hace acreedor de un Grammy Latino a mejor video (2014), por tema de la banda venezolana La Vida Bohéme.

Es ahora cuando Carl da el salto a dirección cinematográfica, con la adaptación al cine de la novela “Un vampiro en Maracaibo” de Norberto José Olivar.

Este proyecto comenzó a tomar forma en el 2013, cuando compró los derechos de la novela, para iniciar su lectura y preparación del guión, manteniendo el eje central de la novela, sumando algunos detalles libre de inspiración, como el perro y el final de la producción venezolana, logrando plasmar en pantalla una historia intensa y hábilmente diluida en tres tiempos.

El pasado 29 de mayo en el cine Milenium de Cines Unidos, en Caracas, se realizó la presentación a la prensa del film. Carl en la rueda de prensa, acotó lo siguiente: “Como ya saben, traigo a la pantalla esta adaptación literaria de la novela “Un vampiro en Maracaibo”, de Norberto José Olivar. Intenté ser lo más fiel posible a la historia, porque sin duda es uno de mis libros favoritos. Fue un reto adaptar una novela tan interesante, compleja y que además me guste tanto. Siempre traté de conservar todo, pero hay cosas que hay que cortar y dejar ir. Mantuve la esencia de la novela y sus personajes principales, a lo que le sumé algunos detalles cinematográficos a la historia, cargada de acontecimientos que van convergiendo en una sola historia. Una vez que obtuve un guión con el que me sentía cómodo, introduje el proyecto en el CNAC, en el 2015”.

La trama

“El vampiro del lago” se centra en el escritor Ernesto Navarro y en un ex policía retirado, llamado Jeremías Morales.

En el 2016 Ernesto (Sócrates Serrano) busca elementos claves para escribir su segunda novela y decide que versara sobre un asesino en serie, etiquetado como el vampiro, todo un caso policial que fue noticia en 1975.

En esa búsqueda de información, Ernesto conocerá a la persona encargada de aquel caso, Jeremías Morales (Miguel Ángel Landa), y quien le dará todos los detalles.

Jeremías es un ex policía retirado, cuyo pasado quedó marcado por ese caso, no solo por la investigación, sino por lo que tuvo que realizar.

Ernesto cree saber más y más de lo sucedido en 1975, pero sin saberlo, estará poseído por una esencia oscura e invisible, algo que en su momento no pudo captar a Jeremías.

 

 

Lo acaecido en 1975 se convierte en el eje central del film, porque se sigue el caso de Zacarías, el vampiro del llano, que asesinó a 33 personas. A la vez, esta historia se irá inicios del Siglo XX (por un testimonio dado por Agapito) y va contando lo que va sucediendo en el 2016, con un final de relevo, en medio de un ritual de horrendos e infernales crímenes.

Lo interesante del libro y de la película, es la sucesión de personajes del lado del mal, que lo encarna Eduardo Gulino, quien da vida a los asesinos, o sea, el de comienzos del siglo XX (el padre adoptivo de Agapito), Zacarías Ortega el de 1975 y Villegas, del 2016. Tres personas distintas, unidos por un toque oscuro y sangriento.

 

Mientras Miguel Ángel Landa y el joven actor Abilio Torres, dan vida a Jeremías Morales. Es de destacar que el viejo Jeremías dará paso al joven comisario, cuando comienza a relatar sus vivencias, ante Ernesto.

También son parte del elenco Abilio Torres, Julie Restifo, Antonio Cuevas, Javier Vidal y Francisco Díaz como Agapito mayor.

Todos ellos inmerso en una historia de crímenes atroces, dominado por una fuerza sobrenatural y maligna.

Un film con su dosis de drama, suspenso, horror y tensión policial, que resulta en “muy buen trabajo” de dirección y producción Carl Zitelmann, avalado por la exitosa producción de Rodolfo Cova, cuya carrera premiada con un GOYA y un León de Oro, por la película “Azul y no tan Rosa” y “Desde Allá”.

Rodolfo Cova es conocido por estar en la producción de los dramas “Azul y no tan Rosa”, “Desde Allá” y “La familia” (de Gustavo Rondón Córdova), la comedia “Papita, Maní y Tostón”, de los thrillers  “Puras Joyitas”, “Secreto de Confesión” y “Piedra, papel o tijera” (de Hernán Jabes), etc.

A nivel internacional, ha producido “Las hijas de Abril” del mexicano Michael Franco.




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