Domingo 31 de mayo de 1981
Lo que venía tratándose de mantener oculto a toda costa reventó esta semana con la denuncia en este diario sobre la inexorable destrucción que sufre el artístico plafond del Teatro Municipal, declarado Monumento Nacional, y restaurado hace más de dos años por un costo superior a los 700 mil bolívares.
El hecho ha llenado de indignación a las personas que conservan afecto por esta ciudad y defienden su patrimonio cultural. Y es que el caso del Teatro Municipal ha sido una especie de ensañamiento contra una institución que era el faro de la divulgación cultural desde finales del siglo pasado. Primero lo destruyeron todo hasta no dejar nada de su estructura original a excepción del plafond a fin de aumentar los gastos. Ahora lo que quedaba, que es la obra de Herrera Toro, se está volviendo añicos, porque durante dos años y medio ha estado expuesta a vibraciones, a las inclemencias del polvo, el calor y la humedad.
Cuando el caso sale a la calle y la opinión publica comienza a protestar los responsables del deterioro van a argumentar que la culpa es del restaurador, el sr Baranowski, porque no utilizó los materiales adecuados.
Queremos dejar muy claro que nosotros no estamos defendiendo a ultranza al mencionado artista polaco. Nuestra posición está enmarcada en dos hechos: una obra de arte Patrimonio Nacional se está destruyendo, ante la indiferencia de los organismos gubernamentales, que hasta el momento, no han emitido ni siquiera una declaración sobre el caso. La otra es que el deterioro se presenta porque el edificio ha sido recargado de peso sobre el techo, y esto lógicamente ha afectado la delicada obra pictórica.
Cuando hacemos esta denuncia cumplimos con un deber de ciudadano y de periodista, porque se trata de la destrucción de un bien nacional. No estamos atacando ni defendiendo a una personalidad determinada. El Municipal está a la vista. Basta solamente con mirar el mamotreto que se le ha encaramado en el techo para concluir en que lo que allí se ha hecho es un atroz disparate, del cual debe haber algún responsable.
RADIO
Radio Rumbos: 6 a 7 a.m. Venezuela es Bellísima, programa de Reinaldo Espinoza Hernández en el cual se destaca lo mejor de nuestro país. 7 a 8 a.m. Rumbos de Venezuela. A las nueve de la noche escuchen Gran Salón.
Radio Latina: 6 a 8 a.m. Hecho en Venezuela, programa producido y comentado por Alfonso Navas Martínez, en el cual el país es la estrella, por su música, sus paisajes y tradiciones.
A las ocho de la mañana Concierto en Radio Latina, obsequio de exquisitos fragmentos musicales, de los grandes maestros, que nos ofrece don Santiago Sánchez González. A las seis de la tarde Wilmer Rafael Hernández, en su muy escuchado espacio Grandes Artistas Grandes Éxitos dará a conocer una cantante venezolana llamada Stella.
Durante la semana recomendamos escuchar el microprograma Signo y Presencia del Arte Venezolano, con textos de Juan Calzadilla y narración de Víctor Cadet, de lunes a viernes a la una del mediodía, y sábados y domingos a las seis de la tarde.
Radio Satélite: A las cinco de la tarde Quinta Dimensión, programa de Arteaga Palencia y sus invitados. A las siete de la noche Haydée Cadet presentará a su programa estelar El Sonido del Jazz.
ARTES PLÁSTICAS:
ARMANDO PÉREZ, luego de tres años sin exponer en Valencia muestra su obra reciente, enmarcada en un grafismo cuyo soporte es el color. Galería de Arte de la Universidad de Carabobo, plaza de la urbanización Prebo. En este mismo lugar ALICIA BENAMU Y MÉRIDA OCHOA presentan cerámicas recientes que son una verdadera lección del arte milenario. A no faltar.
