Un hombre de 69 años murió ayer en su domicilio de Alicante tras haber estado cinco días con fiebre y esperando una asistencia sanitaria que nunca llegó tras tres llamadas a emergencias en cuatro días, publicó el Diario Información
El hijo del fallecido, Gabriel Orozco, consideró que lo de su padre es una negligencia y el claro ejemplo de que el sistema no tiene capacidad de respuesta.
Aunque no estaba confirmado oficialmente que estuviese afectado por el coronavirus, lo que aclarará Sanidad en 24 horas, sí presentaba previamente síntomas y por ello el levantamiento del cadáver y su traslado se realizó extremando las medidas de protección para evitar contagios, mientras que la mujer y dos hijos del fallecido se quedaron confinados en la vivienda sin que nadie les hiciera prueba alguna.
Los servicios de emergencia fueron alertados aproximadamente poco después de las ocho de la mañana. Efectivos de la Policía Local y dos ambulancias del SAMU y de Soporte Vital Básico (SVB) se personaron inicialmente en el inmueble, situado en la calle Montengón, en el Casco Antiguo de Alicante. Sin embargo, los sanitarios solo pudieron confirmar el fallecimiento.
Familiares de la víctima confirmaron a la Policía que presentaba síntomas compatibles con el coronavirus y llamaron al 112, donde le recetaron paracetamol y le indicaron que darían aviso a Sanidad y que en 48 horas les atenderían, algo que no ocurrió.
Gabriel Orozco, uno de los hijos de Jesús que reside en Inglaterra, relató ayer a este diario que su padre comenzó a tener fiebre el pasado 15 de marzo y al día siguiente llamaron a los teléfonos de emergencia, pero cada vez que lo hacían les indicaban que llamase en 48 horas. "Así hasta que ayer empeoró y falleció sobre las ocho de la mañana".
Seis horas antes contactaron con una médico privado porque estaba agonizando y le prescribió antibiótico por llevar tantos días con fiebre, pero no se recuperó, reseñó Diario Información
Según El Pitazo, Orozco Romero era primo del político, abogado y exsecretario de la Mesa de la Unidad Democrática, Ramón Guillermo Aveledo.