Periodistas latinoamericanos advirtieron, en un congreso que concluye hoy en Buenos Aires, de los riesgos que afrontan los comunicadores en la región, desde el hostigamiento judicial y campañas de descrédito hasta la cárcel y crímenes perpetrados por gobiernos autoritarios y bandas criminales.
Es una situación que afecta en modo evidente a países como Venezuela pero también, de un modo más velado, a otros aparentemente sin problemas para los periodistas, como Uruguay, según se puso de manifiesto en la jornada final del XIII Congreso Internacional de Periodismo organizado por el Foro de Periodismo Argentino (FOPEA).
"El panorama en Venezuela es devastador. Desde el inicio del gobierno chavista ha venido creciendo la persecución al periodismo e incluso la autocensura", dijo la periodista venezolana Sofía Nunes, que trabaja en Buenos Aires en el portal Urgente 24 y que en su país lo hizo en El Informador y en Diario Yaracuy al Día.
Nunes precisó que en los últimos cinco años han cerrado unos 200 periódicos en Venezuela, mientras muchos otros han pasado a manos gubernamentales.
La periodista, que desde 2016 reside en Argentina, aseveró que lo que hay en su país es "periodismo de guerra, aunque suene exagerado".
"El gobierno ha instaurado el miedo y, si no ha ganado la batalla completa, ha ganado bastante territorio. Hay muchos periodistas en el exilio", señaló.
Octavio Alfonso Enriquez Cabistán, periodista a cargo de investigaciones en el diario La Prensa, de Nicaragua, describió la situación de represión gubernamental que se vive en su país y cómo esto afecta al periodismo.
"El contexto es muy difícil para la ciudadanía en general. Se han recibido reportes de agresiones contra periodistas y se han quemado medios de comunicación", señaló.
Enriquez Cabistán afirmó que "corre riesgos" pero no deja de denunciar y documentar las violaciones de derechos humanos en Nicaragua.
La periodista ecuatoriana Mónica Almeida, creadora de la unidad de investigación del periódico El Universo, de Quito, hizo un recuento de los hostigamientos a la prensa durante el Gobierno de Rafael Correa (2007-2017).
Para ello, explicó, se montó toda una estructura de leyes que condicionaron la labor profesional, por ejemplo, ahogando económicamente a los medios con la aplicación de multas.
Ahora, advirtió, se suma una nueva amenaza, la del narcotráfico, responsable este año del asesinato de tres periodistas del diario ecuatoriano El Comercio.
"Perdimos a tres. Y eso nos ha empujado también a tratar de hacer nuestra profesión con mayor cuidado y de estar preparados para lo que se nos viene, que va a ser enfrentamientos de bandas", señaló.
El periodista uruguayo Fabián Werner sostuvo que en Latinoamérica, en aquellos países donde no es el Estado el responsable de las agresiones a periodistas, los gobiernos tienen un "desinterés" por "perseguir los delitos" contra los periodistas y los medios.
"Lo que muestra esto es una especie de estrategia de descrédito permanente hacia los medios de comunicación. La consecuencia es una crisis de credibilidad de la prensa", advirtió Werner, coordinador del área de Libertad de Expresión de la organización no gubernamental uruguaya Centro de Archivos y Acceso a la Información Pública (CAinfo).
Werner observó que si bien se tiene la idea de que Uruguay es menos hostil con la prensa que otros países, también hay prácticas "preocupantes" de amenaza a los periodistas que tienen que ver con el hostigamiento judicial.
El periodista uruguayo anunció que organizaciones de periodistas de Uruguay, Argentina, Venezuela, Perú, Honduras, Bolivia y Ecuador se unirán en el proyecto Voces del Sur, para hacer un seguimiento conjunto de amenazas a la libertad de expresión en la región y elaborar un informe anual.
Entre ayer, viernes, y hoy, el Congreso Internacional de Periodismo reunió a expertos y comunicadores que debatieron y analizaron temas como la investigación periodística, la publicidad oficial, la información económica, el aporte de los datos abiertos, la producción de podcasts y el liderazgo femenino en las redacciones.
Constituido en 2002, FOPEA es un espacio de reflexión, diálogo y promoción de la calidad del periodismo, creado por un grupo de profesionales de medios de comunicación y docentes.