Los siete hombres que murieron la tarde del lunes en la Torre Viasa, ubicada en la avenida Sur 25, en Bellas Artes, próxima al Seniat y a la Defensoría del Pueblo, serían sometidos a reconocimiento post mortem en presencia de un fiscal del Ministerio Público.
De acuerdo con la versión policial, los funcionarios ingresaron a la torre en busca de los individuos que a las 12 del mediodía atacaron en la avenida Bolívar, Sur 21, al oficial José Antonio Canales Alemán, le robaron la pistola y le dieron un tiro en el rostro.
La fuente policial indica que hubo un enfrentamiento, murieron Johan Mijares (22), con registro policial, Vladimir González (con registro policial), Asley Flores (con registro policial), Johanny Roca Gil, solicitado, Alexis Lozada (31), Deiverson Fernández y Maiber Jesús Rojas (20), con registro policial, recuperaron cuatro pistolas, dos revólveres y una escopeta calibre 12.
Este miércoles los familiares continuaban en la morgue de Bello Monte esperando al representante de la Fiscalía, al tiempo que adelantaban los trámites para los actos fúnebres. Sin embargo tenían mucha incertidumbre porque no les daban fecha de entrega y temen que los cuerpos se descompongan.
Los parientes coinciden en afirmar que los funcionarios irrumpieron en la torre y que no hubo enfrentamiento.
Ernesto Mijares, padre de Johan Alberto Mijares Izquiel (22), no estaba en la torre porque salió a hacer unas compras. Cuando regresó la edificación estaba tomada por la policía y no les permitían el ingreso a los parientes. Dijo que esa tarde no hubo atención en el Seniat, porque trancaron la calle y no había paso para esa dependencia.
Después del entierro, Mijares acudirá a la Fiscalía 125, para denunciar el ajusticiamiento de su hijo.
-La policía tomó el edificio a las 12:30 y a las 3 de la tarde se escucharon los disparos. Separaron a los hombres de las mujeres y niños. Los bajaron a planta y luego los fueron subiendo a medida que los chequeaban.
Johan Mijares estaba bajo presentación a raíz de un delito que cometió hace dos años. El mismo día que lo detuvieron fue presentado en tribunales, quedó en libertad condicional, con presentación cada 30 días y seis meses de trabajo comunitario.
Para reclamar el cuerpo en la morgue tuvieron que presentar la partida de nacimiento, porque los funcionarios le botaron todos los documentos.
Vecinos de la torre contaron que oyeron a los hombres clamar por su vida, rogando que no los mataran. Cuando subieron a Deiverson Fernández Maiz al piso 11, unas personas que estaban en el piso 12 lo escucharon llorar y gritar “no me maten, no me maten”, pero los gritos de Fernández fueron ahogados por un sonoro disparo. Ni siquiera lo oyeron quejarse, pero aquel silencio indicaba que estaba muerto.
Las víctimas recibieron tiros certeros. Asley Flores presentó un tiro en el pecho. Sus familiares van a trasladarlo a Cumaná, de donde era oriundo. A Johanny José Roca Gil lo velarán en una funeraria de San Martín, otros serán velados en la misma torre.
Los familiares de los difuntos se reunieron para denunciar amedrentamiento y acoso policial por parte de la PNB, ya que durante la noche del martes estuvieron apostados en la puerta del edificio y patrullando la zona para atemorizarlos.
