Carlos Eduardo Monasterios Núñez (78) era jubilado de la Universidad Central de Venezuela y murió por politraumatismo y traumatismo cráneo-encefálico al ser arrollado por un vehículo en la avenida principal de Ruiz Pineda.
Monasterios trabajó por mas de 30 años en la facultad de Odontología como técnico en equipos médicos y se dedicaba a hacer reparaciones particulares.
El lunes regresaba a su domicilio después de hacer un trabajo y entre 8 y 9 de la noche fue embestido por un carro Fiat palio que lo proyectó hacia adelante.
Testigos del suceso dijeron que el conductor del carro frenó y se bajó y al ver que una turba de personas iba hacia el, se asustó, se montó en su vehículo y huyó rápidamente. Al acelerar volvió a arrollar al jubilado.
Ninguna persona lo auxilió, hasta que pasó una comisión del Cicpc y lo trasladó al hospital Miguel Perez Carreño. No lo recibieron porque no tenían insumos para atenderlo, fue referido al hospital del Llanito y murió a las 2 de la madrugada del martes.
Monasterios vivía en el bloque 14 de Ruiz Pineda, y sus familiares se enteraron el martes en la tarde porque uno de sus clientes lo llamó al celular y le respondió un extraño.
El día que lo arrollaron a Monasterios le quitaron el teléfono y la cartera.
La persona que tenia el celular le contó al cliente lo que había pasado y así se lo transmitió al familiar, quien llamó al Cicpc y le dieron la información.
El sitio donde arrollaron a Monasterios es peligroso, según los vecinos. Hace dos meses un vehículo embistió un trailer de comida rápida, donde comían varias personas, hubo dos muertos y seis heridos.
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