La policía y los bomberos se reúnen el 3 de enero de 2020 en un parque de la ciudad de Villejuif, al sur de París, donde un hombre mató a cuchillo a una persona e hirió al menos otras dos. El individuo fue luego perseguido y abatido por la policía en otra localidad. AFP

Una persona murió y dos resultaron heridas en un ataque con cuchillo perpetrado el viernes en Villejuif, al sur de París, por un hombre que luego fue abatido por la policía francesa.

El ataque se produjo aproximadamente a las 14H00 horas locales (13H00 GMT) en un parque de esta ciudad situada al sur de la capital francesa.

Por razones desconocidas, el hombre atacó a los peatones y mató a un hombre e hirió a otras dos personas -un hombre que se encuentra grave y una mujer que tiene heridas leves-, según las autoridades.

También trató de «atacar a otras víctimas que lograron evitarlo», dijo la fiscal Laure Beccuau en una rueda de prensa.

Según el alcalde de Villejuif, Franck Le Bohellec, el fallecido es un residente de la comuna, de 56 años. «Caminaba con su esposa cuando el agresor se acercó a ella, trató de protegerla y fue él quien fue acuchillado», dijo a la AFP.

Mapa de la región parisina, donde se muestra la situación de Villejuif, en las afueras de París, lugar en donde un hombre apuñaló a varias personas el 3 de enero. AFP

El agresor intentó escapar pero fue alcanzado mortalmente por disparos de policías de la brigada de lucha contra la delincuencia en la comuna vecina de Hay les Roses, indicaron las fuentes.

«Oímos gritos, después 3 disparos. Salí para ver qué sucedía. Luego hubo 5 o 6 disparos y sirenas. Nos atrincheramos en el garaje» explicó a la AFP Rouane Yazid, de 40 años, propietario de un garaje.

Una foto tomada en el lugar inmediatamente después del ataque y transmitida a la AFP lo muestra tendido de espalda en una encrucijada, vestido con lo que parece ser una chilaba negra.

«Trastornos psicológicos»

Según fuentes coincidentes vinculadas al caso, el agresor, identificado como Nathan C. y nacido en Lilas (Sena-San Denis), sufría de «trastornos psicológicos» y no era conocido por radicalización.

Sin embargo, se encontró una bolsa de su propiedad «a varios centenares de metros» del lugar del ataque, que contenía su tarjeta bancaria y «elementos religiosos», «que dejan pensar que se había convertido al islam», según la fiscalía.

Se ha abierto una investigación por «asesinato e intento de asesinato», de acuerdo con las fuentes.

Al lugar de los hechos acudió el viceministro de Interior, Laurent Nuñez, que explicó que la intervención de los policías impidió «la continuación de lo que era una aventura asesina».

«Huyó hasta el centro comercial de Hay les Roses, donde tenía la clara intención de continuar sus agresiones», declaró el alcalde de esa comuna, Vincent Jeanbrun, a una cadena de televisión.

«Afortunadamente, la policía fue alertada rápidamente y pudo llegar muy pronto al lugar y neutralizarlo con un disparo», añadió.

El presidente de Francia, Emmanuel Macron, expresó su «apoyo a las víctimas (…), a sus familias y a las fuerzas del orden». «Continuamos con determinación la lucha contra la violencia ciega (indiscriminada)», escribió en Twitter.

Amenaza constante de atentados

Policía y bomberos se reúnen el 3 de enero de 2020 en Hay les Roses, en el sitio donde la policía abatió a tiros a un hombre que mató con cuchillo a una persona e hirió al menos a otras dos en un parque en las afueras de París. AFP

Este ataque se produce cuando Francia vive bajo una amenaza terrorista constante, y a pocos días del quinto aniversario de los atentados yihadistas contra el periódico satírico Charlie Hebdo y de una tienda Kosher de la cadena Hyper Cacher, los días 7 y 9 de enero de 2015.

En 2019, la justicia antiterrorista se ocupó de tres ataques: un apuñalamiento en marzo de dos guardias de la prisión de Condé sur Sarthe (noroeste de Francia) por un detenido radicalizado, Michael Chiolo; un atentado con paquete bomba frente a una panadería de Lyon (centro este) en mayo, que hirió a 14 personas; y un ataque en la prefectura de policía de París, que causó cuatro muertos el 3 de octubre.

En este último ataque, la investigación no ha podido aún determinar oficialmente los motivos de Mickael Arpón, el funcionario sospechoso de radicalización, que mató con un cuchillo a cuatro de sus colegas antes de ser abatido.

Si se incluyen estas cuatro víctimas, la ola de atentados en Francia ha causado 255 muertos desde principios de 2015.

Desde 2013 se frustraron 60 atentados, el último a finales de septiembre, según el ministerio del Interior. AFP




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