La tragedia que se vive en Venezuela ha causado una emigración masiva, la gente huye desesperadamente del infierno en el que el régimen de Maduro tiene sumido al país, y en muchos lugares nuestra gente noble y buena está siendo maltratada, actualmente tenemos el caso de la violación que en Argentina ejecutó un hombre contra una joven venezolana.
ÉL VIOLÓ A LA MUCHACHA Y LA JUEZ VIOLÓ LA LEY
A sabiendas de la extrema pobreza de los venezolanos que huyen de la tragedia, un sujeto de nombre Humberto Garzón, argentino él, en Facebook publicaba un aviso expresamente dirigido a ese sufrido sector, allí decía: “Portal de empleo para venezolanos en Argentina…se solicita vendedora para local de indumentaria en Recoleta…” La muchacha que junto a su pequeño grupo familiar, venciendo calamidades migratorias había logrado llegar a aquel país donde desesperaba por un empleo, salió rauda al encuentro de aquella oportunidad laboral, llegada al local comercial denominado “Garzón uniformes” de inmediato la atendió el miserable que había puesto el aviso quien al verla joven y bonita le dijo que quedaba contratada y de inmediato se dispuso a seducirla, le ofreció un trago de vodka que ella rechazó -no tomo licor, le dijo, pero el hombre insistía -vamos a conversar, tómate algo. -Agua estará bien, ella le dijo. El tipo le trajo un vaso con agua al que le había puesto una sustancia fuerte que de inmediato la adormeció y como loco se puso a cerrar puertas y ventanas, la muchacha texteó a la mamá quien llamó a la policía que de inmediato se trasladó al lugar, pero tuvieron que forzar la puerta porque no le abrían.
La muchacha cayó inconsciente mientras el tipo la violaba, se despertó cuando una funcionaria policial le estaba poniendo los pantalones pues estaba desnuda y botando una espuma verde por la boca como narra un noticiero de televisión que puede verse en este enlace: https://www.pagina12.com.ar/320669-abuso-sexual-en-once-la-joven-venezolana-relato-como-fue-el-
Al escándalo por este monstruoso hecho le sucedió otro por la actitud de la juez que atendió el caso, ella abrió proceso por violación, pero dejó en libertad al violador, la excusa que esgrimió fue que no tenía antecedentes, como dándole perdón por ser la primera vez. Esto viene causando conmoción al punto de que desencadenó una tormenta de protestas que incluye la de los fiscales del caso que consideran absurda dicha decisión y la han apelado, se está a la espera de este recurso, además que hay fuertes pedidos de destitución de la complaciente juez.
OTRO CASO EMBLEMÁTICO, LINDA LOAIZA
En Venezuela tuvimos un precedente horrible, el de Linda Loaiza, una muchacha llegada de Mérida a Caracas a estudiar en la Universidad Central y fue secuestrada por un sujeto de nombre Luis Carrera Almoina quien la mantuvo durante 4 meses encerrada en un apartamento, amordazada, amarrada con cadenas, todos los días la violaba, le introducía palos y otros objetos, la mantenía arrodillada sobre tapas de refresco, le propinaba golpizas tumbándole casi toda la dentadura, le apagaba cigarrillos en la cara. Todos los hechos fueron comprobados pero debido a que el agresor era hijo de un político del entorno de Hugo Chávez, en el año 2014 fue absuelto en primera instancia. Linda Loaiza no desmayó en su lucha logrando que se condenara al violador, pero la interferencia política fue tan fuerte que, a pesar de las incontrastables pruebas en su contra, el secuestrador-violador fue condenado 6 años después, pero solo por los delitos de privación de libertad y lesiones, pero absuelto por violación, homicidio calificado en grado de frustración y tortura. Linda Loaiza continuó en su lucha hasta lograr una sentencia de la Corte Interamericana de los Derechos Humanos que condenó al Estado por violaciones a los derechos humanos al dejar impune los delitos que en el fallo se concretaron como violación, esclavitud sexual y tortura cometidos por un particular y hasta se le ordenó al Estado a reparaciones pecuniarias.
Linda Loaiza es emblema en estas luchas, nunca ha desmayado en ellas, sobreponiéndose a las terribles condiciones físicas, mentales y emocionales del crimen en su contra y del que la justicia venezolana ha cometido y sigue cometiendo en su contra al no cumplir con la sentencia de la CIDH, ella estudió y se graduó de abogada y se ocupa de casos por los derechos humanos en especial de las mujeres.
Ver la sentencia de la CIDH: https://www.corteidh.or.cr/docs/casos/articulos/seriec_362_esp.pdf
EL MÉDICO QUE EN ESTADOS UNIDOS VIOLÓ A 156 MUJERES
Larry Nassar, médico estrella del equipo olímpico de la gimnasia estadounidense tras años de estar cometiendo toda clase de abusos y violaciones sexuales contra jovencitas estudiantes que pasaban por su consulta fue objeto de un juicio que marcó época en Estados Unidos.
Como médico entrenador de la Federación de Gimnasia de EE. UU, Nassar tenía a su cargo la atención a las jovencitas que se disponían a emprender actividades deportivas para ir a competencias nacionales e internacionales. Las aspirantes tenían que pasar por sus manos para los correspondientes exámenes iniciales y luego para los de rutina que periódicamente debían realizarse. En esas actividades se le desataron los demonios sexuales a Nassar quien abusaba desenfrenadamente a las estudiantes algunas de las cuales sufrieron traumas que las llevaron a la drogadicción e incluso algunas al suicidio. Nadie decía nada, algunas tímidas denuncias iniciales eran desestimadas, nadie daba credibilidad a lo que parecía imposible, que aquel médico de dilatada trayectoria, hombre serio, casado, con hijos, fuera capaz de semejantes hechos. Tampoco había muchas denuncias casi nadie se atrevía, incluso hubo padres que castigaban por mentirosas a las hijas que les decían lo que les hacía el médico.
EL JUICIO EN EL JUZGADO DEL CONDADO INGHAM, MICHIGAN
Pero aquella impunidad duró hasta que hubo una denuncia formal que publicó un periódico local, el Indianápolis Star. Entonces se desató una marejada, un reguero de pólvora que atravesó al territorio norteamericano. La gran prensa puso sus ojos en el caso, se abrió un juicio que estuvo a cargo de la jueza de nombre Rosemarie Aquilina quien después de todo el trámite procesal y luego de escuchar el testimonio de 156 mujeres que formalizaron denuncias, una por una relatando sus casos en las audiencias públicas todas esas personas que por 20 años pasaron por manos de este médico. Llegado el momento final del juicio, la juez, mirando al acusado con ojos de águila al ataque le dijo: “Estoy firmando su sentencia de muerte, no has hecho nada para que merezcas andar libre jamás”. Seguidamente le decretó 175 años de cárcel.
En Argentina, en Venezuela y en muchos otros lugares de este mundo necesitamos jueces como Rosemarie Aquilina, requerimos justicia para este abominable delito, justicia que al igual debiera impartirse contra los jueces como los que son benignos con los violadores que con ello se hacen sus cómplices.
VER A LA JUEZ DICTANDO SENTENCIA
Carlos Ramírez López @carlosramirezl3
