Para los comerciantes de la capital carabobeña los días de flexibilización por Carnaval han representado un respiro. Según el vicepresidente de la Cámara de Comercio de Valencia, Lorenzo Araujo, las ventas se recuperaron levemente incluso durante el fin de semana previo al asueto, desde el viernes 12 de febrero.
Aunque evidentemente no representa una recuperación significativa, el sector comercial ha visto incrementada su actividad durante los últimos días por la liberación de restricciones en la circulación y la flexibilización de horarios en los que se les permite laborar a los establecimientos, explicó Araujo.
En horas de la mañana de este lunes 15 de febrero el centro de Valencia no estaba tan concurrido, a pesar de que la mayoría de los negocios se encontraban con sus santamarías arriba y algunos con llamativas promociones en las que se ofrecía hasta 20 % de descuesto en la mercancía.
Sin embargo, el vocero del gremio comercial aseguró que días antes se registró “mucho movimiento en las calles” porque la gente estaba en los preparativos para estos días festivos, adquiriendo “bienes para abastecerse en las playas en las diferentes modalidades o actividades que van a realizar”.
“Ratificamos que el comercio se encuentra preparado y listo para atender al público todos los días y no solo en las semanas de flexibilización”, dijo Araujo. “Conminamos a las autoridades a que elimine el modelo 7+7 porque el comercio tiene todo lo necesario para atender al público cuidando todas las medidas de bioseguridad”.
Ventas propias de Carnaval
Ante la imposibilidad de viajar al litoral carabobeño debido a la falta de poder adquisitivo, Milagros Rivero decidió salir hoy al centro a comprar bombas y adornos de Carnaval para hacer una celebración sencilla en casa y que su hijo de 11 años disfrutara de los días festivos junto a otros familiares.
“En otros años viajaba a la playa, Mérida, Margarita, pero eso se ha acabado. La situación económica, la gasolina, todo eso se juntó”, detalló Rivero a El Carabobeño.
Los precios de los juguetes típicos de estas festividades varían. En los comercios asiáticos ofrecen dos paquetes de 50 bombas por un dólar, una pistola de agua por tres dólares y dos por cinco dólares y las máscaras con luces hasta en cinco dólares.
