El personero del municipio colombiano de Cumaribo, en el departamento de Vichada, Rosendo Rey, denunció hoy una incursión de militares venezolanos que cruzaron la frontera y retuvieron a cinco campesinos, dos de ellos menores de edad.
«El día de ayer, sobre un sitio conocido como Mantequero, se llevaron a cinco colombianos, tres de ellos adultos y dos menores que posteriormente fueron puestos en libertad por parte de estos militares», manifestó Rey en entrevista con la emisora Blu Radio.
El funcionario señaló que los tres ciudadanos secuestrados por miembros de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) fueron presentados en Venezuela como «delincuentes» a quienes les incautaron «armamento largo, granadas y droga».
Rey denunció que las incursiones de militares venezolanos son una «actitud sistemática» y que pasan la frontera del país para «maltratar», «robarle el dinero» y «amenazar» a los comerciantes y campesinos del municipio.
Cumaribo, situado en la región de la Orinoquía, tiene una extensión de 65.193 kilómetros cuadrados, similar a la de países como Lituania o Letonia, y por su tamaño es el más grande de Colombia, pero por su agreste geografía está prácticamente despoblado.
«Es un tema sistemático, hacemos llamado al Gobierno Nacional para que ponga punto final y utilice la diplomacia para buscar respuesta del Gobierno de Venezuela», agregó.
El pasado 21 de agosto Colombia denunció que dos helicópteros y unos 30 militares venezolanos se adentraron en el municipio fronterizo de Tibú, departamento de Norte de Santander (noreste).
Por ese hecho el canciller colombiano, Carlos Holmes Trujillo, se desplazó hasta la zona el pasado 1 de septiembre e izó allí la bandera de Colombia, mientras que Venezuela negó la incursión.
El pasado 1 de diciembre habitantes del departamento de Arauca, también fronterizo con Venezuela, denunciaron que militares venezolanos entraron al país a bordo de una embarcación en horas de la madrugada. EFE
