Para los comerciantes este no ha sido un año fácil. Se nota en el desánimo de algunos de los que trabajan en los principales centros comerciales de la Gran Valencia, quienes tienen todas sus esperanzas puestas en los últimos días antes del 25 de diciembre para evitar una caída mayor de sus ventas al cierre de 2020.
Francis González trabaja como encargada de una tienda de obsequios y envolturas en el centro comercial Free Market, Naguanagua. Le da un trato casi personalizado a los pocos usuarios que se acercan a hacerle alguna consulta. Algo impensable en otros años el fin de semana previo a Navidad, cuando una sola persona era insuficiente para atender la gran demanda de clientes.
“Las ventas han estado muy malas y por debajo del promedio de años anteriores. Incluso el año pasado, ya para esta fecha había mucho movimiento de gente que venía a comprar o envolver algún regalo, pero ahorita es muy poco lo que se ha movido”, detalló a El Carabobeño en horas de la mañana de este sábado 19 de diciembre. Según sus cálculos, la tienda reporta 70% de caída en sus ventas.
Luego de varios meses de restricciones vinculadas al esquema 7+7, en los que debieron seguir pagando impuestos y alquiler a pesar de poder abrir el local solo 15 días al mes, Francis esperaba que la situación fuese diferente en diciembre, tomando en cuenta la flexibilización amplia que inició hace casi tres semanas. Pero no ha sido así. Hasta ahora la demanda sigue siendo poca.
“Estamos apostando a los días que quedan antes del 24, porque después de esa fecha las ventas nunca han sido buenas”, dijo resignada. No tiene grandes expectativas porque este viernes, cuando inició el último fin de semana antes de Navidad, fue “totalmente muerto”.
En el mismo centro comercial trabaja Ariana Escobar, encargada de una tienda de ropa y calzado. Coincidió con Francis al decir que este año las ventas son mucho más bajas en comparación con 2019. A pesar de que desde el 1º de diciembre ha podido abrir de forma consecutiva durante dos semanas gracias a la flexibilización amplia, hasta la fecha ha vendido 60% menos que la anterior temporada decembrina.
“Las personas que sí tienen posibilidad de comprar ropa y zapatos, lo hacen más que todo para los niños. Ellos son la prioridad ahorita”, aseguró tras ser consultada por El Carabobeño sobre la dinámica de los compradores. “Esperamos que desde hoy hasta el mismo jueves las ventas mejoren, porque ya después, entre el 26 y el 31, son mucho más bajas”.
A juicio de Ariana, no solo la falta de poder adquisitivo ha impedido que las personas se acerquen hasta el centro comercial, sino también otros problemas que este años se sumaron a la larga lista preexistente, como la aguda escasez de combustible que mantiene a los usuarios en largas filas a las afueras de las estaciones de servicio.
Pasadas las 10:30 a.m., ya casi todas las tiendas del centro comercial Sambil Valencia estaban abiertas. En algunas había, incluso, pequeñas filas de personas a la espera para entrar. No porque se registrara una asistencia masiva, sino para mantener el control del aforo dentro de los locales como parte del protocolo de bioseguridad.
Un trabajador de una de las franquicias del español Grupo Inditex, quien prefirió no identificarse, señaló a El Carabobeño que desde la implementación de la flexibilización amplia hasta hoy la asistencia de usuarios ha sido constante. Como Francis y Ariana, también espera que las ventas aumenten en los próximos días antes del 25 de diciembre.
