El Ejército de Burkina Faso mató a 29 yihadistas en respuesta a un ataque contra las fuerzas armadas burkinesas en la localidad de Gomboro, situada en la provincia de Sourou, en el noroeste del país, según una fuente militar.
Los yihadistas murieron en el contraataque de unidades militares y de la Gendarmería en la zona después de que fueran atacadas por individuos armados, informó la dirección de Comunicación y Relaciones Públicas de las Fuerzas Armadas de Burkina Faso en un comunicado transmitido hoy a Efe.
Durante los combates que ocurrieron el sábado resultaron heridos 11 soldados y se recuperaron armas, vehículos y equipos de comunicaciones, según el comunicado.
Burkina Faso sufre ataques yihadistas desde abril de 2015, cuando miembros de un grupo afiliado a Al Qaeda secuestraron a un guardia de seguridad rumano en una mina de manganeso Tambao, al norte del país, que aún sigue desaparecido.
El Ejército de Burkina Faso mata a 29 yihadistas
Los ataques se suelen atribuir al grupo local burkinés Ansarul Islam, a la coalición yihadista del Sahel, afiliada a Al Qaeda, al Grupo de Apoyo al Islam, a los Musulmanes (GSIM) y al Estado Islámico en el Gran Sáhara (EIGS).
La región más golpeada por la inseguridad es la de Sahel (norte), que comparte frontera con Mali y Níger, aunque el yihadismo también se ha expandido a otras áreas del país, como la región del Boucle du Mouhoun (donde se encuentra la provincia de Sourou), desde 2017, y la región Este del país, desde 2018.
El pasado noviembre, un ataque contra un puesto de la Gendarmería causo 53 muertos (49 gendarmes y 4 civiles), generando un gran descontento social que se tradujo en fuertes protestas para exigir la dimisión del presidente burkinés, Roch Marc Christian Kaboré.
La inseguridad ha ocasionado que el número de desplazados internos ascienda ya a 1,4 millones de personas, según datos del Consejo Nacional de Emergencias y Rehabilitación (CONASUR) del Gobierno burkinés.
