Ana Rodríguez está confundida y muy preocupada por la cotización del dólar y la situación económica. Ella decidió gastar su pensión en un pote de shampoo y dos prendas de ropa para su nieta. Luego de esas compras ya no le quedaba nada de los 130 bolívares que le fueron depositados este mes por concepto de su pensión.
Para ella los precios en el centro de Valencia este viernes 26 de agosto estaban por las nubes, y no es sorpresa después de las fluctuaciones en el precio del dólar. En el centro se respira una aparente normalidad, los comercios se encuentran abiertos y en las paredes o en la caja del establecimiento se pueden ver los carteles con la tasa oficial del día publicada por el Banco Central de Venezuela (BCV).
En un recorrido realizado por El Carabobeño se observó que la cantidad de personas que transita por el boulevard cercano a la plaza Bolívar es más bien escasa para un viernes a las 12 del mediodía. Los negocios se ven solitarios, aunque muchos de ellos cuentan con promociones y ofertas en sus vitrinas.
El gerente de una tienda de ropa, que prefirió no ser identificado, comentó que las ventas han bajado mucho esta semana. Además, explicó que ayer calcularon todas las ventas a 7,04 bolívares y cuando cerraron el precio del dólar se había disparado a 7,80 bolívares. Al final todas las transacciones del día se habían devaluado.
Señaló que desde la semana pasada el 80% de las ventas ha sido por punto, tendencia que se ha mantenido. Muy pocas personas están pagando en divisas, porque la mayoría quiere salir de los bolívares.
Para él es evidente que la actividad económica está paralizada, la normalidad no existe. Resaltó que solo hace falta ver la cantidad de personas que camina por las calles con bolsas de compras y compararlo con la afluencia de la semana pasada. “La gente con este golpe prefiere comprar comida antes que ropa”.
El equipo de El Carabobeño también visitó otros centros comerciales de Valencia, como La Granja y Freemarket, donde se repite la historia. Se observan muy pocos clientes aunque todos los negocios se encuentran abiertos. También cuentan con las hojas impresas en las que se refleja la tasa oficial del día según el BCV.
Devaluación formal
El presidente de la Cámara de Comercio de Valencia, Lorenzo Araujo, aseguró en entrevista para El Carabobeño que el alza del dólar afecta tanto al consumidor como a los comerciantes. Señaló que el incremento en el precio de los productos se debe a una devaluación formal por parte del BCV, que en los últimos dos o tres días también ha aumentado la tasa oficial de cambio.
A su juicio, el mayor problema de los comerciantes es la reposición de sus productos, debido a que muchos proveedores informales se rigen por la tasa del dólar paralelo, perolos comercios deben cumplir con la tasa oficial del Banco Central de Venezuela (BCV).
Para Araujo uno de los puntos que más preocupa es el freno producido en la economía y en la actividad comercial constante. Recordó que la actividad comercial venía creciendo desde principio de año, y hasta el mes de mayo, de forma co sostenida. En junio tuvo un estancamiento y en julio comenzó a tener cierta contención, en parte por la implementación del impuesto a las grandes transacciones.
Desde la Cámara de Comercio de Valencia han recomendado a los afiliados mantener la tasa del BCV, porque es la tasa oficial a través de la cual pueden trabajar legalmente, y evitar cualquier tipo de sanciones del Indepabis o Seniat que están haciendo revisiones. Sobre esos operativos, Araujo afirmó que se han realizado de forma puntual y muy respetuosa.
