Miguel Linares se impacienta en la cola de gasolina de la E/S Paramacay, Naguanagua. Su vehículo ha permanecido inmóvil en los últimos 11 días que lleva en la fila. Cercana a su lugar de estacionamiento se encuentra una estación a precio internacional en la que, asegura, ha visto llegar tres gandolas.
Jonathan Espinoza confirmó las apreciaciones de Linares. La mañana de este miércoles, a punto de encabezar la cola, indicó que había acudido a la bomba La Granja porque el combustible llega con mayor frecuencia en estaciones de modalidad premium. “Empezaron a surtir ayer a las 5:00 pm y la fila ha estado avanzando desde entonces”.
Para Linares la situación es injusta. Considera que priorizar el suministro de gasolina en las estaciones internacionales es una medida de presión que obliga a las personas a pagar $0.5 el litro. “Muchos de los que estamos acá no tenemos las posibilidades económicas para surtir 30 litros a ese costo”.
En la E/S Santa Ana, Militza Martínez tampoco cuenta con divisas para costear gasolina en dólares.
La señora optó por hacer la cola de pie porque ya no le queda ni una gota de gasolina en el tanque. “Que llegue en nombre de Dios, porque ya no aguantamos”, expresó tras dos semanas de espera y aguantando el sol.
Permanecen colas en estaciones premium
Denis Gutiérrez madruga cada día en la E/S Guaparo de la avenida Bolívar Norte de Valencia: el lunes surtió su moto antes del mediodía, ahora vuelve a la cola que se extiende hasta el elevado El Trigal.
Otros usuarios de esa estación advierten que, aunque llega todos los días, la gasolina es insuficiente para abastecer todos los vehículos.
En San Diego las bombas privadas no tienen la misma suerte. El sábado fue la última vez que llegó una gandola a la E/S El Valle, pese a la modalidad de pago internacional.
En el mismo municipio, la bomba subsidiada Castillito también recibió gasolina el fin de semana. “Es caótico, a penas 50 vehículos consiguieron abastecerse”, reclamó Elbert Salcedo, en la fila desde el domingo.
Carabobeños imploran respuestas
En medio de la incertidumbre, los carabobeños se organizan en grupos ciudadanos para obtener información que el Gobierno no aporta.
La E/S Bohío estaba abasteciendo sólo 20 litros por vehículo la mañana del miércoles, según reportaron los usuarios en grupos de Whatsapp creados con este fin. La cola, extendida por la ARC hasta la altura del C.C Metrópolis, sería la más larga de la región hasta el momento.
Los ciudadanos manifestaron intranquilidad por el silencio de las autoridades. Se arriesgan, faltan a sus empleos para permanecer en las colas sin que nadie les garantice que llegará la gandola. “No sabemos qué ha sucedido aquí. Ninguna autoridad nos dice lo que ocurre en esta estación. Queremos una respuesta”, exigió Simón Padilla.
En un recorrido por los principales expendios de combustible de la Gran Valencia, El Carabobeño solicitó información al personal encargado de las gasolineras.
El gerente de la bomba Naguanagua (avenida Bolívar vieja), Guillermo Pérez, se limitó a comunicar que la gasolina no llega desde hace cinco días, sin ofrecer detalles de cuándo volverán a recibir combustible.
Ninguna otra oficina proporcionó datos.
Lea también: Usuarios de transporte público padecen por escasez de efectivo