Habitantes del sector casco norte de la parroquia San Blas, viven en zozobra pues aseguran que delincuentes se han apoderado de un inmueble en ruinas ubicado en la calle Maitin, para esconderse después de hacer sus fechorías.
Los denunciantes Juana Mora, Roberto Bañez, Ana Mora, Mayela Daza y María Hernández, indicaron que la casa, junto a otras, fue cancelada a sus dueños por el Ejecutivo regional, bajo la administración de Acosta Carles, pues está ubicada en el retiro de seguridad de la Autopista del Este, por lo que es propiedad de la gobernación.
El problema radica en que desde hace un buen tiempo se ha convertido en sitio de guarida de delincuentes, quienes la utilizan como trampolín para robar en viviendas cercanas.
Según señalaron, ningún vecino puede dejar nada en los patios, pues los sujetos se han llevado bombonas, bombillos, hamacas, ollas y hasta la ropa que guindan para secar.
Uno de los inmuebles afectados por este tipo de delitos, es la Casa de Abuelos de San Blas, de donde sustrajeron bombonas de gas e implementos de cocina, afectando el buen desenvolvimiento de la institución.
Los vecinos denunciaron el hecho ante el módulo policial que está al lado de la iglesia, pero esto no ha impedido que la situación irregular continúe.
Por eso solicitan a la gobernación que ordene patrullaje policial por la zona, y que demuela este inmueble, ubicado cerca de la cancha techada del sector.
Con nota de prensa
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