Al menos cincuenta familias de la comunidad de Cachindó, en el departamento colombiano del Chocó (oeste), se vieron obligadas a dejar sus hogares amenazadas por la violencia de miembros del grupo de origen paramilitar Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC), informó este jueves la ONU.
La huida del medio centenar de familias se produjo el pasado viernes, después de que el día anterior un habitante de la misma comunidad fuera asesinado por las AGC, que forman parte del Clan del Golfo, informó la Oficina de las Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA).
La información agrega que estos hechos generaron limitaciones a la movilidad y restricciones en el acceso a bienes y servicios básicos de aproximadamente 25 familias de la comunidad de Toco, del mismo municipio chocoano.
El Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) se comprometió a atender a niños, adolescentes y jóvenes afectados, mientras que la Policía y las Fuerzas Militares se comprometieron a realizar patrullajes y brindar protección especial a la familia atacada.
El Clan del Golfo, que está considerado como la mayor banda criminal del país, nació tras la desmovilización de las paramilitares Autodefensas Unidas de Colombia (AUC) y contra ellos el Gobierno lanzó la «Operación Agamenón» con el objetivo de terminar con esa organización.
El pasado mes de diciembre, un total de 327 personas debieron salir de sus hogares en el Chocó por la violencia de las AGC.
El desplazamiento masivo se produjo por las violaciones al Derecho Internacional Humanitario que cometieron las AGC contra comunidades indígenas y afrodescendientes en varias aldeas de Bahía Solano (Chocó).