Desnivel en la entrada de una de las viviendas. (Foto cortesía)

La ruptura de una tubería matriz de Hidrocentro en la avenida Norte Sur, manzana II, de la urbanización Lomas de Funval, al sur de Valencia, amenaza la infraestructura de al menos 25 viviendas. Tres años han pasado desde que inició el problema y, ante la falta de soluciones, la humedad ha causado estragos en el lugar.

Carmen Jiménez es una de las vecinas afectadas. Con preocupación ha visto cómo la fuga de aguas blancas prácticamente ha destruido el pavimento de la mitad de la cuadra y comienza a socavar las entradas de las viviendas. “En el porche y la entrada de mi casa ya hay humedad. Casi que se levanta el piso”, dijo este miércoles 17 de febrero en entrevista con El Carabobeño.

Frente a su casa se hizo un enorme hueco que se ha convertido, según sus palabras, en una piscina a la que los niños de la comunidad acuden a bañarse. Pero además, el agua se ha ido empozando en varios puntos a lo largo y ancho de la calle, generando otros huecos que con el paso de los meses han empeorado.

Cuando suspenden el suministro de agua, el hueco queda seco, pero apenas lo restituyen comienza a emanar líquido. (Foto cortesía)

El deterioro del pavimento complica el tránsito vehicular en la zona. “Los carros casi ya no pueden pasar por aquí”, aseguró la habitante de Lomas de Funval. “Nosotros mismos, los vecinos, tenemos que estar tapando los huecos con tierra y piedras para que puedan pasar los vehículos”.

Aunque la solución de este problema le compete a Hidrocentro, en al menos dos oportunidades funcionarios de la Alcaldía de Valencia se acercaron al sector para evaluar la situación, agregó. Sin embargo, en ambas ocasiones la respuesta fue la misma: No tienen el tubo que se requiere para hacer la reparación.

“La última vez el consejo comunal nos informó que se necesitaba un dólar por cada casa para reparar el tubo”, denunció Jiménez. En ese momento los vecinos se negaron a pagar y hasta la fecha el problema persiste, mientras miles de litros de agua limpia continúan desperdiciándose a diario.

(Foto cortesía)

Por estar en la zona baja, el bote de agua no afecta el suministro en las 25 casas de la cuadra. Sin embargo, quienes viven en la parte alta de la manzana II, en la manzana I y en el urbanismo de las petrocasas, sí padecen las consecuencias de esa ruptura. “Ellos a veces tienen que venir a buscar agua a esta piscina porque no les llega”.

Muy cerca de la manzana II, frente al ambulatorio de Lomas de Funval, otra fuga que no ha sido reparada socavó gran parte de la avenida.

Los grandes huecos que se han formado en las adyacencias del centro asistencial no solo dificultan el paso de los vehículos, sino también ponen en riesgo a quienes transitan a diario por allí. Jiménez alertó que el pasado lunes 15 de febrero un motorizado cayó en el cráter de mayor tamaño.

“Nosotros estamos preocupados de que eso nos siga dañando las calles y las casas”, expuso la vocera del sector. “Le hacemos un llamado a la Gobernación, porque hay muchas personas que padecen de la falta del vital líquido mientras aquí se pierde a diario”.




Estimado lector: El Diario El Carabobeño es defensor de los valores democráticos y de la comunicación libre y plural, por lo que los invitamos a emitir sus comentarios con respeto. No está permitida la publicación de mensajes violentos, ofensivos, difamatorios o que infrinjan lo estipulado en el artículo 27 de la Ley de Responsabilidad en Radio, TV y Medios Electrónicos. Nos reservamos el derecho a eliminar los mensajes que incumplan esta normativa y serán suprimidos del portal los contenidos que violen la Constitución y las leyes.